“Decile que salga o te la voy a entregar en pedacitos”, amenazó a su exsuegra un sujeto oriundo de Quimilí (Moreno), exigiendo hablar con la hija de esta —su expareja—, de la cual está separado hace tres meses.
Tras ser denunciado por su exconcubina, quien se presentó en la Comisaría Nº 9 de la Mujer y la Familia y dio cuenta de lo sucedido, el sujeto fue detenido por orden de la Dra. Cecilia Laportilla, jueza de Género, que hizo lugar al requerimiento efectuado por el Dr. Diego Cortés Ledesma, de turno en la Unidad Fiscal de Género y Violencia Intrafamiliar para la Circunscripción Capital, quien le imputó los delitos de amenazas calificadas y desobediencia judicial, ya que el inculpado tenía impuestas medidas restrictivas desde enero del corriente año, las que incumplió.
El relato de la víctima
La joven víctima, de 21 años, informó al personal policial que tuvo una relación de pareja con el inculpado, que se extendió por 5 años, y que producto de la misma tienen una hija en común.
Relató que en la mañana del sábado último, alrededor de las 7.30, el sujeto se presentó en la casa de la madre de ella, situada en el barrio San Francisco de esa ciudad, al parecer bajo efectos de sustancias tóxicas, y comenzó a gritarle exigiéndole que salga, mientras le advertía que “si no lo hacía por las buenas, lo haría por las malas”.
La progenitora de la joven se levantó —ya que estaba durmiendo— para atender al sujeto y pedirle que se retirara de su domicilio, momento en el cual le hizo la grave amenaza de que mataría a la joven si no salía.
Una denuncia anterior
La damnificada sostuvo que el 21 de enero del corriente año ya había denunciado a su expareja por un hecho similar, ocasión en que le impusieron una perimetral, prohibiéndole que se acerque a ella y también todo tipo de contacto.
Ante la negativa de retirarse del domicilio, decidieron llamar a la Policía a fin de salvaguardar la integridad física de los integrantes del grupo familiar, ya que el acusado seguía afuera profiriendo graves amenazas.
A los pocos minutos arribaron los efectivos, que de inmediato redujeron al sujeto e informaron de la situación al fiscal Cortés Ledesma, quien requirió a la jueza Laportilla que ordene detener al agresor, medida que ya fue cumplimentada.
