Benicio Herrera tenía 12 años y vivía en el barrio Independencia de la Capital. Jugaba al fútbol y era muy compañero de su padre. Diego Torres tenía 37 años y residía en la localidad del Puestito de San Antonio (Capital). Ambos fallecieron en un choque en cadena en la Ruta Nacional 9.
Eran las 3.45 de la madrugada de ayer, cuando los efectivos de la Comisaría Nº 37 de Árraga —departamento Silípica— terminaban de realizar pericias tras un choque entre dos autos. En ese momento fueron alertados de un siniestro vial a escasos metros del lugar.
El trágico escenario fue el Kilómetro 1.111. Por el sitio circulaba un Volkswagen Gol que era conducido por Ramón Díaz, de 44 años, del barrio Siglo XX, quien por causas que se investigan colisionó violentamente contra dos motocicletas.
Según se conoció, se trataba de una Honda Biz que era guiada por Carlos Herrera, de 43 años, quien viajaba junto a su hijo Benicio, de 12 -ambos residentes en el barrio Independencia- y de una Honda XR, en la que se movilizaba Diego Torres, junto a su pareja identificada como Silvia Torres, de 41.
A causa del violento impacto, Diego perdió el control del rodado y colisionó contra un Ford Fiesta estacionado, propiedad de una mujer de apellido Alagastino, de 53 años.
De inmediato se hizo presente en el lugar el personal de emergencias, que pudo determinar que lamentablemente Benicio y Diego se encontraban sin signos vitales.
Los cuerpos fueron trasladados a la morgue judicial, donde se les iba a practicar la autopsia de rigor.
Mientras, Carlos y Silvia tuvieron que ser hospitalizados en el Regional Dr. Ramón Carrillo en grave estado de salud. Presentan politraumatismos y fracturas. Por orden judicial, Ramón Díaz fue aprehendido e imputado por el accidente de tránsito que resultó fatal.
Despedida a Benicio
El fallecimiento del menor de 12 años causó un gran dolor entre sus familiares, compañeros y amigos, quienes lo despedían en redes sociales con incontables mensajes de despedida.