Gracias a un operativo que se concretó en el sur de la Provincia de Buenos Aires, los pesquisas policiales lograron detener ayer a un individuo, quien está sospechado de haber violado a sus dos ahijadas, de 12 y 15 años. El aberrante caso se conoció cuando las menores le confesaron a su madre los abusos sexuales que padecían, en momentos en que eran llevadas por la mujer al consultorio de un ginecólogo.
Los voceros judiciales revelaron que el sujeto de 35 años fue apresado en la calle Moreno, entre Formosa e Islas Malvinas, en la localidad de Costa Azul. De acuerdo a lo manifestado por los informantes, las diligencias estuvieron a cargo del doctor Martín Miguel Prieto, fiscal de la Unidad Funcional N° 2 de Mar del Tuyú, quien resolvió encomendarles la realización de las mismas a los servidores públicos destinados en la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) de la zona.
Trascendió que el calvario que sufrían las chicas se conoció porque le explicaron lo que sucedía a su progenitora, en momentos en que la mujer las llevaba a efectuarse una consulta con un ginecólogo. A raíz de este motivo, la madre de las víctimas decidió radicar una denuncia ante las autoridades de la Justicia, ocasión en la que sindicó como autor material de los ultrajes al padrino de sus hijas.
Intervino en la causa penal, que preventivamente fue caratulada “Abuso sexual agravado con acceso carnal”, el magistrado Diego Olivera Zapiola, titular del Juzgado de Garantías N° 4 de los tribunales de la jurisdicción. Por razones legales, no divulgaremos los datos filiatorios de las diversas personas implicadas en lo acontecido.
Con información de Crónica
