“Por favor pueden venir a mi casa. Mi hermana está siendo golpeada por el novio. La va a terminar matando”, fue el pedido desesperado de un joven de 20 años a la Policía. La mujer, no solo se negó a denunciar a su pareja, sino que además intentó agredir físicamente a los efectivos que intentaron auxiliarla.
Cerca de las siete de la tarde del domingo, un joven de 20 años llegó a su vivienda, ubicada en calle Las Heras, del barrio La Católica, para descansar. En ese momento, encontró a su hermana mayor que estaba manteniendo una discusión con su pareja. La mujer de 22 años convive con un joven de 18, quien la estaba agrediendo.
Temiendo por la vida de su hermana, el joven llamó a la Policía. Los “guardianes del orden” de la subcomisaría de la costanera sur se dirigieron al inmueble. En ese momento, la víctima también salió al hall de la casa, donde comenzó a agredir con palabras irreproducibles a los efectivos, mientras les ordenaba que “se fueran del sitio”.
Los policías intentaron tranquilizarla y brindarle contención, para realizar la denuncia penal por lesiones. Pero la mujer se negó e intentó lesionar a los policías. La joven ingresó a la vivienda y les cerró la puerta a los uniformados, para impedir el ingreso a la propiedad, mientras los insultaba. La mujer, además, les habría manifestado que “ella estaba bien y no los había llamado”.
Los policías intentaron, en reiteradas oportunidades, ayudar a la damnificada, pero esta se negó a radicar la denuncia en contra de su pareja. Los uniformados informaron la situación a la Unidad Fiscal de turno, por lo que se ordenó una serie de medidas judiciales a seguir en las próximas horas.
En tanto, se realiza un informe socio-ambiental y un relevamiento vecinal en el domicilio de la damnificada, con el objetivo de establecer si existieron otros hechos de violencia que no fueron denunciados.
