A pesar de la inactividad en el Palacio de Tribunales por el asueto declarado por el Día del Empleado Judicial, el tribunal que juzga a los acusados por el crimen de “Luisito” Toloza programó una audiencia para receptar importantes testimonios, como el del padre de la víctima, el de una menor que encontró el cadáver del occiso y de la testigo Érika Alsina, apodada “Pacola”, una mae umbanda que cobijó en su casa a los hermanos Jonathan y Alan Fernández Oro, quienes la ayudaban en la atención de la despensa que posee.
“Pacola” sostuvo que Alan Fernández Oro no tenía jerarquía alguna en el umbandismo, y ni siquiera se había bautizado en esa religión. Los dichos de la testigo dejaron en claro que el accionar de Alan Fernández Oro, respecto de rituales umbandistas que decía hacer, era una verdadera farsa.
“Pacola” admitió haber realizado una “limpieza en la casa de Gabriela Franco —en el capitalino barrio Aeropuerto— donde habían encontrado imágenes de San La Muerte que —al parecer— había dejado el anterior propietario.