La familia Rossi vive un momento soñado. Los hermanos Franco (32) y Nazareno (34), vienen teniendo un 2023 más que positivo y ambos se consagraron campeones en sus respectivos clubes, aunque el primero de ellos con el fútbol y el restante en básquet.
Franco Rossi es defensor y se consagró campeón del Torneo Anual de la Liga Santiagueña con Unión Santiago luego de 11 años de sequía y ahora le apunta al ascenso al Federal A.
Mientras que Nazareno Rossi logró el título de la Asociación Capitalina de Básquet con Jorge Newbery, al vencer a Quimsa en la final, tras haber perdido anteriormente dos finales ante el mismo rival.
Ambos dialogaron de forma exclusiva con Nuevo Diario y no ocultaron su felicidad por este presente soñado.
—¿Cómo viven este momento?
—Nazareno Rossi: Por suerte nos tocó festejar luego de dos finales perdidas. Ha sido un camino duro, nos hemos preparado todo el año para ganar el título y por suerte se nos ha dado en estos últimos tramos con un rival duro como Quimsa. Hemos dado lo mejor y pudimos conseguir el anhelado título.
—Franco Rossi: Ha sido un hermoso año, nos preparamos para esto. Yo estoy hace varios años en Unión Santiago. Siempre nos quedábamos a mitad de camino, si no era por una cosa u otra, no se nos daba, pero esta temporada se dio todo como lo esperábamos, como lo habíamos planeado. En lo personal estoy feliz, contento y es algo que siempre anhelaba salir campeón con Unión Santiago, club al que le tengo mucho cariño y respeto.
—¿Qué consideran que fue lo mejor de cada equipo?
—FR: El grupo, la familia. Fuimos de menor a mayor y eso dio los frutos para estar festejando el campeonato. Hubo mucho esfuerzo, sacrificio, tuvimos poco descanso, hubo una seguidilla de partidos y el cuerpo técnico encabezado por Juan Pablo Gómez nos exigió al máximo. Entrenamos con frío, lluvia o sol.
—NR: A comparación del año pasado, sumamos dos jugadores de experiencia. Veníamos siendo un equipo corto, pero en esta temporada cambió todo. Eso fue la base para el título. Para Newbery nada es fácil, todo cuesta el doble, pero como decía mi hermano, la unión del grupo es fundamental. Se nos dio a los dos.
—Nazareno, como remarcabas venían perdiendo algunas finales, dos de ellas ante Quimsa y la tercera fue la vencida ante el mismo rival...
—NR: Sí, veníamos perdiendo algunas finales pospandemia. Perdimos en una de ellas en un Pre-federal ante Nicolás Avellaneda, después dos finales seguidas con Quimsa. En la tercera pudimos ganarles. Fue durísima por todo lo que significa este rival.
—Franco, ¿Cuál fue el partido bisagra para la consagración?
—FR: La serie ante Central Argentino fue clave. Todos coincidimos con ello. Fue una llave muy difícil y dura, tanto de local como de visitantes al igual que la final ante Vélez de San Ramón, pero lo supimos manejar con mucha tranquilidad y pudimos imponernos por penales. A nosotros nadie nos regaló nada e incluso las tres llaves las comenzamos perdiendo, pero tuvimos paciencia y la experiencia de varios fue clave.
—¿Cómo viven en lo personal cada uno de ustedes el hecho de haber salido campeones el mismo año siendo hermanos?
—FR: A nivel familiar estamos muy contentos, felices. Nuestros padres están orgullosos. Primero le tocó salir campeón a Nazareno, lo fui a ver en las tres finales. Me pone muy contento por mi hermano. Si bien no vivimos juntos, nos acompañamos siempre el uno para el otro. Durante los festejos de Jorge Newbery yo lo abrazaba, él me dijo que ahora me tocaba a mí y se nos dio. Lo estamos disfrutando con la gente que queremos y siempre están con nosotros.
—NR: Con Franco siempre nos acompañamos en momentos cruciales. Es una alegría inmensa este momento. Yo estoy orgulloso de mi hermano, sé de la constancia y lo que lucha día a día, incluso más que uno mismo. Estamos felices todos en la familia y nuestro cuñado Luis Leguizamón (jugador de Unión Santiago) también es parte de esto. Mi viejo está feliz por nosotros. Hay que festejar y ahora se nos viene un nuevo desafío, en lo personal el Prefederal.
—Nazareno, ¿en algún momento te tiró el fútbol o siempre fuiste del básquet?
—NR: Recuerdo que jugué un torneo Confraternidad hace muchos años, era arquero de Estudiantes. Pasaron los años, y me gustó más el básquet. Sigo en Newbery y también jugué en Independiente BBC, Central Córdoba, Patagonia y Chaco.
—Franco, ¿lo tuyo siempre fue el fútbol?
—Sí, siempre fútbol. No soy bueno para el básquet (risas).
—Me imagino que ambos ahora redoblan la apuesta
—FR: Tuvimos una semana de descanso y el lunes arrancamos de cero pensando en Regional Federal. Ya hay que dejar atrás el festejo, fue muy lindo, y se viene lo más importante. Quiero lograr un ascenso con Unión Santiago, es un gigante dormido que tuvo sus grandes momentos y grandes jugadores. Hay que volver a esa senda y llegar lo más lejos posible. No va a ser fácil, pero nos vamos a preparar de la mejor manera con el gran grupo que tenemos, de la mano del senador Montenegro. Ojalá sea el momento de dar el salto.
—NR: Tenemos el objetivo firme, ya comenzamos a trabajar pensando en el Prefederal y se sumaron varios chicos. Vamos a pelear por el ascenso al Federal y seguramente seremos el rival a vencer porque somos campeones. Queremos el título e ir por más.
—¿Dedicatorias?
—FR: Se lo dedico a mi familia que siempre estuvo. A mi viejo que es incondicional, siempre está firme con los dos y en especial esto es para nuestro abuelo. Lo perdimos en la pandemia, él era un hincha más y le pedí mucho para que nos ayude.
—NR: A mi novia, a mis cuñados, a mis hermanos, a mis viejos y a mi abuelo que siempre nos guía desde arriba.