Una mujer de 35 años fue encontrada estrangulada en una vivienda de la ciudad de Resistencia, en la provincia de Chaco. Por este femicidio, las autoridades detuvieron a su pareja, quien se declaró inocente ante la justicia.
El descubrimiento del hecho ocurrió en la madrugada del domingo, cuando el cuñado de la víctima ingresó a la casa de su hermano, identificado como Marcelo Godoy. Encontró a Yasmín Margarita Silvestre sin vida en una cama y alertó a la Policía.
Inicialmente, se sospechó de un posible suicidio, pero el fiscal a cargo del caso, Jorge Cáceres Olivera, ordenó la realización de la autopsia correspondiente. Según el informe preliminar, las lesiones en el cuello no fueron autoinfligidas y fueron provocadas por un tercero, posiblemente utilizando un cable para estrangularla. Además, se determinó que el femicidio tuvo lugar entre las 17 y las 20 horas del sábado.
En base a estas evidencias, la fiscalía decidió la aprehensión de Marcelo Godoy, quien fue la última persona en ver a la víctima con vida. Durante la declaración indagatoria, el sospechoso negó haber cometido el crimen y afirmó que se encontraba en otro lugar en el momento del hecho.
Sin embargo, el fiscal especializado en violencia de género de Resistencia consideró que la coartada del acusado aún no ha sido comprobada y decidió mantenerlo bajo prisión como principal sospechoso del delito de "homicidio agravado por el vínculo en contexto de violencia de género", que conlleva una pena de prisión perpetua.
Las autoridades esperan el informe final de la autopsia para confirmar definitivamente las causas del fallecimiento y continuarán con la investigación, entrevistando a testigos para descartar o reconsiderar la posibilidad de que otra persona haya sido responsable del femicidio.
