En la cama, descansando y mirando televisión, fue encontrado un camionero por la Policía. Apenas vio a los efectivos les dijo: “Si aquí no pasó nada. ¿Qué hacen?”. Su pareja llamó a los policías, luego de que la amenazara de muerte e intentara agredirla físicamente.
Eran aproximadamente las once de la noche del jueves, cuando una mujer de 30 años estaba en su vivienda ubicada en el paraje Cantamampa, departamento Ojo de Agua. En ese momento, comenzó a tener un fuerte cruce de palabras con su concubino. Ambos conviven desde hace diez años y fruto de la relación tienen dos hijos menores. El sujeto trabaja como camionero. El mismo le habría realizado una escena de celos a la mujer, por lo que posteriormente comenzaron a tener un cruce de palabras.
Posteriormente, el sujeto comenzó a insultarla delante de los menores. Se levantó de la silla y comenzó a amenazarla de muerte, mientras le cuestionaba una supuesta infidelidad.
La pareja comenzó a forcejear y el sujeto intentó agredirla físicamente. Le habría realizado el ademán de atacarla a cachetadas. La mujer lo enfrentó y, tras un forcejeo, se dirigió a su habitación.
De inmediato, la mujer tomó el teléfono y llamó a la Policía. Se comunicó con los efectivos de la Comisaría de la Mujer y la Familia, a quienes les contó los pormenores del grave incidente, al tiempo que indicó que el sujeto estaba aún en la vivienda. Para evitar una tragedia, los uniformados se apersonaron de inmediato en el inmueble de la damnificada, con quien se entrevistaron personalmente.
Ante los “guardianes del orden”, la víctima indicó que no quería radicar ninguna denuncia en contra de su pareja. Por lo que aseguró que los había llamado para que lo sacaran de la casa, ya que es una persona conflictiva y temía que reaccionara de manera violenta. Luego les indicó a los uniformados dónde se encontraba el sujeto. Los efectivos ingresaron a la propiedad y lo encontraron descansando en la habitación de la pareja, mirando televisión. Sorprendido por la presencia de los uniformados, les dijo: “Aquí no pasó nada”, para luego sacar sus pertenencias del ropero y retirarse de la propiedad. Mientras que la mujer se negó a denunciarlo penalmente.
