Minutos antes de la hora 0 de ayer, un vecino del barrio Independencia de la Capital, quien es empleado municipal, de 35 años, se encontraba alcoholizado en su domicilio, donde inició una discusión con su pareja, a quien le propinó un empujón en medio del enfrentamiento verbal. La agresión generó la intervención del hijo de la mujer, de 15 años y fruto de otra relación sentimental, quien presenció el violento hecho. El adolescente y su padrastro protagonizaron un enfrentamiento verbal, ocasión en la que intercambiaron golpes de puño. En medio de la pelea, el estudiante se retiró del domicilio y buscó ayuda en un pastor evangélico del citado complejo habitacional, quien contuvo emocionalmente a su vecino y decidió informar lo sucedido a la Policía.
Personal de la Comisaría de la Mujer y la Familia Nº 16 se trasladó al lugar y se entrevistó con la madre del menor, quien contó lo que había sucedido, tal como le había relatado el menor al pastor. En esa circunstancia, la mujer indicó que su concubino tendría problemas con las bebidas alcohólicas y las sustancias tóxicas, y se pone violento al consumirlas. Sin embargo, indicó que no iba a realizar ninguna denuncia en representación de su hijo.
El hecho fue informado a la Unidad Fiscal de Violencia de Género e Intrafamiliar, que ordenó que se actuara de oficio y el adolescente sea examinado por el médico de Policía con la presencia de un mayor. El profesional de la salud diagnosticó lesiones curables en cuatro días, salvo complicaciones.
Posteriormente, se presentó el padre biológico del menor, quien afirmó ante los uniformados que no es la primera vez que ocurre este tipo de hechos violentos, aunque tampoco quiso realizar la denuncia en contra del sospechoso por las lesiones que presentaba el estudiante.
Ante esta situación, la Fiscalía ordenó que se realizara un acta y que fuera firmada por los padres del menor. Asimismo, dispuso que el informe sea enviado al Ministerio Público Fiscal.
