De “buena fe” pagó 10 mil pesos por una motocicleta que está valuada en 450.000 pesos. La Policía “le cayó” en su casa y tuvo que entregar el vehículo que había sido robado horas antes. Estaba completamente desarmado.
Las pesquisas que fueron llevadas a cabo por el personal de la Sección Robos y hurtos de la Departamental Nº 3 Zona Sur iniciaron cerca de las 18.30 del jueves último, cuando un joven de 22 años de apellido Carott denunció que desconocidos irrumpieron en su vivienda que está ubicada en el barrio Campo Contreras.
Desde su propiedad le sustrajeron una motocicleta Bajaj Rouser 180, la que estaba estacionada sin traba de seguridad y con la llave de encendido colocada. El robo se habría producido cuando el mismo se encontraba descansando en la propiedad, junto a sus familiares.
Procedimiento
Con los datos aportados por el damnificado, los uniformados iniciaron las pesquisas a requerimiento de la Unidad Fiscal de la Circunscripción de Capital, a cargo de la Dra. Eugenia Gallegari. Se realizaron seguimiento de las cámaras de seguridad tanto de domicilios particulares y comercios de la zona; como las de la Policía de la Provincia.
Se logró hacer un seguimiento y se pudo identificar a los sospechosos. Los investigadores, cerca de las ocho de la noche, llegaron a una vivienda ubicada en calle Guasayán del barrio San José de Flores, donde se entrevistaron con un sujeto residente en el inmueble.
El sujeto tomó conocimiento que los uniformados se encontraban buscando una motocicleta robada y con información recolectada, pudieron determinar que el vehículo sustraído horas antes se encontraba en su inmueble. El vecino indicó que, “horas antes había comprado de buena fe una motocicleta por la suma de 10 mil pesos a dos sujetos”.
Entrega voluntaria
Posteriormente, realizó la entrega voluntaria del rodado. Los “guardianes del orden” lograron recuperar la motocicleta, que estaba completamente desarmada. Solo le habían dejado el cuadro.
Los plásticos, las ruedas y demás accesorios del rodado estaban siendo limpiados. Se realizaron los trabajos de fotografías y planimetrías en el inmueble por parte de los efectivos de la División Policía Científica a requerimiento de la fiscal Gallegari; mientras que se iniciaron las averiguaciones pertinentes sobre los pormenores del caso.
Ahora, los uniformados llevan a cabo una minuciosa investigación con el fin de poder aprehender a los responsables del hecho delictivo. Se recepcionan declaraciones testimoniales a los testigos del hecho.
