Un septuagenario domiciliado en la zona rural de Icaño, departamento Avellaneda, que estaba acusado de haber ultrajado sexualmente a su nieta de 15 años, pero registrada legalmente como su hija, fue condenado -en un juicio abreviado- por el Tribunal Unipersonal a cargo de la Dra. Rosa Falco, a cumplir la pena de 9 años y 6 meses de prisión.
La magistrada declaró la admisibilidad del trámite abreviado, y homologó el acuerdo que le presentaron los Dres. Santiago Bridoux y Cecilia Rímini, representantes del Ministerio Fiscal, y el Dr. Enrique Crespín, abogado defensor del acusado.
Además, la camarista escuchó la opinión de la Dra. Andrea Blinder, defensora oficial que intervino como Ministerio Pupilar, en representación de la adolescente.
Los hechos denunciados
El inculpado, de 72 años, fue denunciado por su hija -madre biológica de la víctima- tras tomar conocimiento de los abusos sexuales que sufría la menor, que salieron a la luz el 3 de mayo de 2020, cuando la adolescente sufrió una descompensación -síndrome convulsivo- momentos después de evitar un nuevo abuso, debiendo ser internada en el hospital Zonal.
La menor relató que su padre-abuelo comenzó a abusarla luego que falleciera su abuela -en el 2018-, y tales abusos y consistían en tocamientos en distintas partes del cuerpo. besos. y manoseos en zonas de los pechos y entrepiernas.
Indicó que el acusado se valía de amenazas de muerte, en otras ocasiones la amordazaba para que no grite o la ataba a la cama con gomas, introducirle la cara en agua o azotarla con un látigo.
