Está acusado de cometer abusos sexuales contra de 16 chicos de entre 3 y 5 años en el Jardín de Infantes 31 del barrio Melipal de la ciudad de Neuquén. Se trata de un maestro de música, de 44 años, que fue traslado a una dependencia de detención federal para el cumplimiento de la prisión preventiva que se le dictó. Y se sumaron más denuncias.
Durante la audiencia, en la que quedó preso, el hombre se limitó a declarar que “comprendía perfectamente” la acusación que se le realizaba.
Las víctimas son 9 varones y 7 nenas, de los turnos mañana y tarde. En las últimas horas se sumaron otras 37 denuncias realizadas por los padres de otros chicos.
La jueza de Garantías, Carina Álvarez, aceptó las imputaciones que le hizo el fiscal Manuel Islas, quien acusó al docente por "abuso sexual simple agravado por ser encargado de la educación".
Islas sostuvo que "de acuerdo con la información provisoria, los hechos ocurrieron estimativamente en un período comprendido entre marzo y julio del actual año durante el dictado de la clase de música que estaba a su cargo, tanto en el turno mañana como tarde".
La audiencia se realizó a puertas cerradas. Los familiares de las víctimas pudieron seguir el procedimiento por zoom en una sala continua. Según trascendió, el acusado mantuvo casi todo el tiempo su rostro tapado con las manos.
Según la acusación del fiscal, algunos de los abusos se habrían cometido cuando el maestro acompañaba a los chicos al baño. Otros habrían sucedido en el aula.
Según la acusación y lo relatado por las víctimas a sus padres, el acusado realizaba una serie de juegos perversos.
En horas de clase, apagaba las luces del aula y obligaba a los nenes a acostarse en el suelo, lo que llamaba “la siestita”. Para otros usaba nombres como “El sillón” o “El tobogán”.
Por las penas previstas en el Código Penal, al imputado pueden caberle hasta 50 años de prisión si lo encuentran culpable.
Con información de Crónica
