Había bronca entre ellos desde hacía tiempo. Aparentaba que las asperezas entre ellos estaban limadas. Pero apenas se encontraron en una reunión, alcoholizados, se trenzaron en una pelea. El saldo fue un menor detenido y la víctima con pronóstico reservado con doble fractura de maxilar y golpes en la cabeza.
En las últimas horas del domingo, un joven de 20 años, de apellido Walter, y un grupo de amigos se reunieron en una propiedad de un allegado de apellido Rodríguez, en la ciudad de Frías –departamento Choya-. Estuvieron ingiriendo bebidas alcohólicas, mientras escuchaban música.
El lunes a la madrugada, los demás presentes se retiraron, Walter y el agresor de 17 años habían quedado solos. En ese momento, se produjo el brutal ataque. El adolescente comenzó a propinarle golpes de puño en el rostro y en la cabeza a Walter, quien terminó inconsciente y ensangrentado. Mientras que el agresor se dio a la fuga. Al día siguiente, el dueño de casa encontró a la víctima mal herida y llamó a un familiar, para que lo trasladara a un centro de salud para que recibiera asistencia médica.
Fue internado en el hospital zonal de Frías, donde se estableció que presenta una doble fractura de mandíbula y politraumatismo de cráneo. Las autoridades del hospital solicitaron la intervención policial y se dio intervención a la Unidad Fiscal de Choya y Guasayán, a cargo del Dr. Alfonso Arce.
Tras las averiguaciones, se logró detener a un menor de 17 años, quien fue imputado del supuesto delito de lesiones graves. El agresor fue alojado en sede policial e indagado por el fiscal Arce en la jornada de ayer. Mientras que Walter permanece internado en grave estado.
La Policía y la Fiscalía lograron esclarecer el violento ataque que sufrió la víctima tras recabar una importante cantidad de evidencias que sindicaban al detenido como el autor del hecho. Principalmente, un video que había logrado filmar tras propinarle la paliza al damnificado y el que había viralizado a través de WhatsApp.
Según trascendió, el agresor había grabado al joven ensangrentado e inconsciente, mientras decía: “Ahí está, escupiendo sangre”. Al tiempo que aseguraba: “A ver si se va a hacer el malo cuando pase con su amigo”.
Las pesquisas determinaron, además, que las diferencias entre los jóvenes se habrían ocasionado por un incidente previo que los mismos habrían mantenido. Por lo que la Fiscalía tomará declaraciones testimoniales a los ocasionales testigos del hecho.
