La detención en Catamarca de un médico y un falso policía santiagueño, quienes intentaron sacar de una escuela a un menor, hijo del profesional, con un oficio judicial de Las Termas que habría sido adulterado, generó una denuncia penal y una consecuente investigación para determinar quiénes utilizaron un sello judicial y otro policial, y confeccionaron el escrito, entre otros puntos.
La denuncia penal fue realizada por la Dra. María Viviana Tejera, defensora coordinadora de la Unidad de la Defensa de la Circunscripción Río Hondo y Jiménez, ante el fiscal Ignacio Guzmán.
Tal como publicó Nuevo Diario, el profesional presentó la documentación ante las autoridades de la unidad educativa de San Fernando del Valle de Catamarca, y estaba acompañado por un termense vestido con un uniforme de la fuerza de seguridad santiagueña, con esposas y gorra, además de un chaleco que decía “Policía Judicial de Santiago del Estero”. Se alertó a la Policía y al asesor legal de la institución educativa, tras lo cual se estableció que el médico tenía una medida restrictiva de prohibición de acercamiento y que el uniformado no es integrante de la fuerza de seguridad santiagueña y que portaba una credencial de un policía termense fallecido.
En consecuencia, la Dra. Tejera expuso en la denuncia ante la Fiscalía que analizaron el oficio presentado por el médico y determinaron que no cuenta con las formalidades preestablecidas, entre ellas la carencia del membrete del oficio judicial, tiene un texto informal y una línea cortando los rasgos de la firma que aduce ser de la Dra. Ana Silvia Gerez, integrante de la Unidad de la Defensa, lo que hace sospechar de una maniobra de falsificación o adulteración. En este sentido, dicha funcionaria dijo desconocer el contenido y la realización del escrito.
Asimismo, la Dra. Tejera destacó en la denuncia que el sello de la Defensoría Oficial se encuentra en mesa de entrada y a la vista de todos.
Por otra parte, se utilizó un sello que sería de la Comisaría Comunitaria Nº 50 para confeccionar un documento que afirma que el oficio es una copia fiel.
El objetivo es determinar quiénes utilizaron los sellos y realizaron el falso documento judicial que fue presentado por el médico en Catamarca, donde se encuentra acusado junto al falso policía de “sustracción de menores, en grado de tentativa” y “uso de instrumento público adulterado”.
