Un sujeto domiciliado en el barrio Luján, de la ciudad de Quimilí, departamento Moreno, que se encuentra detenido y cumpliendo prisión preventiva por estar acusado de haber ultrajado sexualmente a una menor, además de incurrir en exhibiciones obscenas en perjuicio de la misma, sufrió un duro revés judicial ya que el Dr. Fernando Paradelo, juez de Control y Garantías parea la Circunscripción Capital, le rechazó la excarcelación y también la prisión domiciliaria solicitada por la defensa.
El planteo de la defensa
Los Dres. Francisco Palau (h) y Pablo Brizuela, abogados defensores del inculpado, habían solicitado el cese de la prisión preventiva y la excarcelación del sujeto, argumentando que transcurrieron más de 8 meses desde que se le dictara dicha medida coercitiva, la cual fue dispuesta el 20 de diciembre de 2020, y que consideraban que la investigación penal preparatoria estaba prácticamente concluida y con una presentación de requisitoria fiscal de elevación del caso a juicio.
Adujeron que no existían riesgos procesales que impidan conceder el beneficio de la excarcelación, “ya que tuvo tiempo suficiente para fugarse y no lo hizo, no tiene antecedentes penales y además tiene domicilio denunciado y arraigo”.
Morigeración
Para el caso que no se hiciera lugar a la excarcelación, los abogados defensores solicitaron una morigeración en la situación de detención del inculpado, y que se le conceda la prisión domiciliaria, a todo lo cual la Dra. Vanina Aguilera —integrante de la Unidad Fiscal para delitos contra la integridad sexual y violencia institucional— se opuso y requirió que se rechacen los planteos.
“Ejercer su influencia”
La fiscal consideró que, más allá de que la Cámara de Apelaciones y de Control en lo Penal le modificó la calificativa, de abuso sexual con acceso carnal a abuso sexual gravemente ultrajante, los riesgos procesales persisten, ya que el inculpado “puede ejercer su influencia, tal como lo demostró al presentarse a declarar con el padre de la víctima, quien le pedía a la menor ‘que todo quede guardado en una cajita’, además de regresar con el progenitor de la menor tratando de ejercer sus influencias”.
En razón de la pena en expectativa, que por el delito endilgado sería de cumplimiento efectivo, y por considerar vigentes los riesgos procesales, el juez rechazó la excarcelación, y denegó la domiciliaria por no encuadrar lo solicitado en las normativas vigentes.
