Un sujeto inculpado en el violento asalto perpetrado en perjuicio de un jubilado domiciliado en la ciudad de Loreto, sufrió otro duro traspié judicial, ya que una integración de la Cámara de Apelaciones y de Control en lo Penal le confirmó la prisión preventiva que le habían dictado a fines de enero de este año.
Tal medida había sido adoptada por la Dra. María Pía Danielsen —jueza de Control y Garantías para la Circunscripción Capital—, quien dispuso que los inculpados Wilson Alberto Bravo y Agustina Florencia Rodríguez continúen tras las rejas. En el caso también está implicado Matías González, quien era menor al momento de ocurrir el hecho ilícito.
Apela la defensa
Dicha resolución fue apelada por la Dra. Analía Loto, integrante del Ministerio Público de la Defensa que asiste legalmente a Bravo, la cual expresó agravios ante el tribunal y solicitó que se revoque la decisión de la magistrada y que se haga lugar al cambio de calificativa y excarcelación de su representado, argumentando la inexistencia de riesgos procesales.
La fiscalía se opuso
Por su parte, el Ministerio Público Fiscal se opuso a la pretensión de la defensora oficial y solicitó que se confirme la resolución de la jueza Danielsen, quien adoptó dicha medida por el término legal de dos años.
La fiscalía sostuvo que los peligros procesales de fuga y entorpecimiento al accionar de la Justicia están aún vigentes, a la vez de advertir sobre la pena en expectativa, que de ser hallados culpables en un juicio será de cumplimiento efectivo.
Pormenores del caso
El hecho ocurrió en horas de la siesta del 9 de diciembre del año pasado, cuando el damnificado Rubén Edmundo Carol (73), estaba descansando en su casa, situada en el loretano barrio El Remanso, cuando de pronto escuchó ruidos. Se levantó para ver qué pasaba y se encontró con dos desconocidos, quienes lo sorprendieron arrojándole una remera hacia el rostro, tapándole los ojos, tras lo cual lo obligaron a ingresar a su habitación, donde lo maniataron con un cable.
El damnificado logró divisar e identificar a uno de los asaltantes. Era Wilson Alberto Bravo, novio de su exempleada doméstica, la imputada Agustina Florencia Rodríguez. Le robaron la suma de 380 mil pesos.
