Cada 17 de septiembre se conmemora el Día del psicopedagogo, tal disciplina científica surgió a mediados del Siglo XIX, y pone en relieve el valor de la interdisciplina al fusionar los saberes y experiencias de la educación y de la salud mental. Para homenajear a estos profesionales, se eligió el día del fallecimiento de Jean Piaget, eminente psicólogo y filósofo suizo, cuyos aportes al estudio del pensamiento han tenido gran trascendencia.
Sobre esta labor y profesión, brindó su análisis el licenciado en psicopedagogía Mariano Adrián Sarmiento: “Decidí estudiar psicopedagogía porque durante la secundaria participé de una charla donde una profesional de tal ámbito explicaba cómo trabajar con los niños que tenían problemas de aprendizaje, ahí comenzó mi curiosidad y consulté por la carrera”.
Al hablar acerca del significado de desempeñarse como tal, expresó: “El poder ayudar a que un niño aprenda, a pesar de sus dificultades, y que se sienta capaz de hacerlo es lo mejor que podemos hacer por ellos. No importa que el niño aprenda despacio, lo importante es que no deje de hacerlo. Lo que más me llamó la atención aquella charla, fue que decía que era bueno equivocarse y que debíamos animarnos a hacerlo, que el error es parte del proceso de aprendizaje. El error es bueno cuando aprendemos de él, no debemos permitir que el equivocarnos nos desanime. De la misma manera, debemos enseñar a nuestros niños a tener más tolerancia frente al error y que no cause frustraciones que desanimen a seguir intentando. Ellos deben saber que el aprendizaje es posible, tal vez no en los tiempos que otros esperan pero que en sus tiempos podrán hacerlo”.
Sobre los cambios que se han producido en tal profesión, indicó que en los más de 15 años que lleva en esto, considera que como profesionales han ganado el reconocimiento de los padres, las escuelas y la sociedad en general. “Algo que años atrás no sucedía, los padres hoy en día ven la importancia que a sus hijos se los ayude con los problemas de aprendizaje, y que los niños en la actualidad necesitan ser acompañados en muchos casos por profesionales que les brinden las herramientas necesarias para que posibiliten el hecho de aprender de manera significativa”, sostuvo.
En la actualidad y el impacto de la pandemia, han establecido un nuevo escenario y por ello, destacó: “Creo que este tiempo de pandemia, se valora tanto el rol del docente como el del psicopedagogo, ya que años anteriores la educación era descalificada, pensando que los niños aprendían a sumar, restar o leer y escribir sin ningún problema. Pero para lograr adquirir estos aprendizajes, hay una serie de procesos cognitivos que entran en juego y que no todos los niños lo logran en el mismo tiempo, ni al mismo ritmo”.
Por último, agregó: “Este último tiempo, hemos aprendido que no hay una sola forma de aprender ni de enseñar. Que las nuevas tecnologías nos brindan otras posibilidades y que las estratevias son muy variadas”.
