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Opinión #Opinión

El Inútil Emprendedor

El Presidente de un país dijo en su discurso anual: ???Ciudadanos, hace un año cuando asumimos el gobierno, nuestra economía se encontraba al borde del precipicio. Hoy, luego de poner en práctica una serie de medidas les puedo asegurar que hemos dado un gran paso adelante??????

El mundo está lleno de gente voluntariosa. Las empresas necesitan gente útil.

 

Es común que quien está más predispuesto a realizar alguna tarea no siempre sea el apropiado para ella. Nuestro trabajo como consultores y el de los gerentes, es detectar a la persona adecuada para ayudar a la organización a alcanzar cada meta.

 

Hasta aquí todo bien; pero hay algo que la teoría no te cuenta: hay gente dispuesta a hacer las tareas, convencida de que tienen la solución y las destrezas indicadas; pero en la realidad están sobrevalorando sus virtudes. 

 

Más bien, me corrijo, confunden el área de aplicación de sus virtudes. (señor director del diario, nótese mi esfuerzo para expresarme en forma políticamente correcta).

 

Y es ahí cuando llegas a lo de un cliente, o el gerente baja al llano y encuentra "la tarea completada", algo que a los ojos del voluntario es una maravilla y a los propios recuerda al padre que cuando llega a su casa halla todas las paredes pintadas con crayón y el nene chiquito sonriendo diciendo "papá, ya las decoré".

 

Mi hermano menor llama a este tipo de sujetos el “inútil emprendedor”. Aquel que con la mejor voluntad arruina las cosas sin que se lo pidan. Eso sí, con la más pura de las intenciones. 

 

El “inútil emprendedor” suele ser más peligroso que el “inútil vocacional” (es decir aquel que está calificado para un trabajo; pero de por sí lo hace mal), porque la diferencia entre el inútil emprendedor y el inútil vocacional es que el primero es proactivo. 

 

Los dos hacen daño; pero el primero viene con impulso. 

 

Recuerdo el caso de una empresa exportadora de carnes donde un inútil emprendedor se puso al hombro el etiquetado de los productos. Como para algunos jefes el inútil emprendedor es funcional o les parece funcional, tal fue este caso, el Gerente de la empresa lo dejó a cargo de la tarea.

 

Sucede que esta persona no estaba preparada para tal función, sólo tenía empuje. Puntualmente, no hablaba el idioma del país al cual iban destinados los cortes de carne por lo que luego de cargar el contenedor, hacer toda la tramitación, cerrarlo y precintarlo; encontraron que les había sobrado una caja con carne empaquetada al vacío. Esto no es algo anormal, el que te sobren 50 kg cuando estás despachando entre 25tn a 40tn.

 

Cuando abrieron la caja sobrante, alguien que sí entiende el idioma del lugar a donde iba la carne, se dio cuenta de que las etiquetas estaban mal puestas, algo así como que la costilla tenga una etiqueta que diga nalga y la nalga tenga una que diga matambre. En resumen, debieron abrir el contenedor, vaciarlo, descongelar toda la carne volverla a clasificar volverla a envasar volverla a congelar, etiquetarla esta vez correctamente y volver a consolidar la carga.

 

En total la empresa perdió una semana de tiempo más las horas extras que tuvieron que pagar, más las cajas y los envases que perdieron y todo por dejar que alguien voluntarioso haga las cosas más rápido sin controlar si era la persona indicada para la tarea.

 

Cuando uno lleva tiempo en un trabajo, ya debería haber identificado a estos sujetos. Si no lo ha hecho, estimado gerente, encontrará ahí la causa de muchos de sus males. Como consultor una de las cosas que uno realiza para estar advertido, es extender las antenas para detectar estos sujetos.

 

La forma más simple de evitar el daño que los inútiles emprendedores producen es la prevención, la detección temprana y el plantear normas claras definiendo bien los roles. Nada más sanador de antemano que un mensaje bien dirigido y nítidamente dado.

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