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Opinión #Opinión

La economía que viene y los Estados inteligentes y eficientes

Análisis del escenario económico a futuro y sus implicancias en lo local, nacional e internacional

En ocasión de la X Feria del Libro de Santiago del Estero, Conciencia y Acción Ciudadana (CyAC) organizó una charla debate en la que participé. La ponencia se tituló “La economía que viene”. Reproduciremos hoy una síntesis de esa charla y además completaremos la idea con un mensaje esperanzador.

 

Vivimos en un mundo en crisis, eso está claro. Crisis medioambiental, debido a las consecuencias de la contaminación indiscriminada y desenfrenada que la sociedad de consumo requiere para seguir creciendo y “renovándose”. Se sabe que los países más poderosos y avanzados son los que más colaboran con el calentamiento global, la contaminación en general y la salvaje deforestación. Pero no son los únicos. Parece que el hombre no aprende la lección y se encamina hacia un mundo sin futuro para las generaciones que vienen. Consumimos nosotros ya el medio ambiente que les tocaba consumir a ellos.

 

Vivimos en un mundo de “Burbujas Especulativas” en todos los órdenes de la vida social y económica mundial. Vivimos en un Planeta “Ponzi”. Una burbuja detrás de otra. Burbujas encima (y adentro) de otras burbujas. Desde la crisis mundial por la explosión de las Burbujas de las Hipotecas basuras (las “Subprime”) en el corazón mismo del país más rico del mundo, Estados Unidos, vivimos hoy una burbuja 7 veces peor que aquella. A punto de explotar… Por supuesto que no todos pierden cuando estas burbujas explotan. Millones de personas pierden sus casas, ya que no pueden seguir pagándolas. Pero hay un 1% de los banqueros más ricos y poderosos del mundo que ganan cantidades industriales de millones de dólares. En el mundo de la economía se lo conoce como el Efecto “Cantillon”: el 1% más rico gana los intereses de la deuda creada, pero a costa del 99% que entra después (en esa estafa piramidal que significa el esquema Ponzi, del cual ya escribimos en muchas columnas).

 

El problema que tenemos es que esta es una crisis sistémica, del capitalismo. El mundo no vive ya en un sistema capitalista, sino en un sistema basado en deudas permanentes. Son las consecuencias del sistema capitalista, debido a que el poder de unos cuantos banqueros está fuera de control desde hace ya unas cuantas décadas. Debido a eso y a los inventos financieros que generan valor de la nada, sin ningún respaldo en una actividad económica/productiva real.

 

Desde que Estados Unidos (EUA) abandona el patrón Oro, saliéndose del Acuerdo de Bretton Woods (jugada sucia pero maestra del mismo EUA), creando los Petrodólares allá por 1971, es que no se sabe cuántos miles de millones de dólares la Reserva Federal ha estado imprimiendo. Como ya no necesita ser respaldada por Oro físico la emisión de dinero está descontrolada. La Reserva Federal le da a la maquinita para lo que venga, siempre y cuando beneficie a esos pocos banqueros y a Estados Unidos. De hecho, la Reserva Federal no es el Banco Central de los Estados Unidos, sino una entidad mixta, estatal y privada, que es manejada por y para los intereses de esos banqueros, los más poderosos del mundo. Ellos son: los Rothschilds, de Londres y Berlín; Lazard de París; Israel Moses Seif de Italia; los Kuhn, Loeb y Warburg de Alemania y las familias Lehman, Goldman, Sachs y Rockefeller de Nueva York. Son los dueños de la Reserva Federal (que de Federal tiene el nombre nomás, para hacer creer al mundo que es del Estado), o sea que son los dueños del mundo occidental. Asesinaron presidentes del mismo Estados Unidos y, por supuesto, invadieron Irak y Libia también, liquidando a Hussein y Gaddafi. Y todos ellos por haber cometido el “error” de haber querido enfrentar los intereses de estos banqueros y por pautar operaciones del comercio del petróleo en otra moneda que no fuera el dólar.

 

Por todo esto, el mundo ya inició un proceso de desdolarización y, por lo tanto, de des globalización. Ni China ni Rusia aceptan más la supremacía del dólar y han comenzado un proceso de intercambio en sus propias monedas. Además de estar acumulando Oro físico y también enormes fortunas en las Criptomendas (Bitcoin, por ejemplo), ante la eventual caída del dólar como la moneda que rige el comercio mundial. Claro, ninguno de estos dos países es tan fácil de invadir. El BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) es el futuro.

 

Santiago, la provincia mejor administrada

Un país con futuro económico exitoso será, por lo tanto, aquel que esté respaldado por la economía real. Y en este punto, nuestra realidad local tiene mucho para decir. Santiago del Estero tiene una riqueza y un potencial enorme en cuanto a diversidad natural y a actividad económica y productiva. Siendo parte de un proceso histórico político revolucionario, nuestro futuro no tiene techo. Esta transformación radical fue posible gracias a un Estado presente e inteligente tanto como eficiente. Con todos los defectos que haya tenido y con todos los aspectos a mejorar en su gestión, es hoy una de las provincias ejemplares a seguir en todo el país. La Fundación Libertad acaba de publicar su Índice de Desarrollo Provincial (IDP) 2019. Santiago es la provincia mejor administrada de todo el Norte Grande y en el 5° lugar a nivel país. Este IDP es elaborado desde 2005 en base a la metodología aplicada por The Fraser Institute para mensurar la libertad económica en los gobiernos subnacionales (provinciales). Las tres áreas de estudio son: a) tamaño del sector público, b) financiamiento del gasto público y c) empleo público provincial. Ciudad de Buenos Aires ocupa la primera posición en el ranking y Formosa la última. Santiago ocupa el primer lugar en el NEA-NOA. Probamos estos 4 años qué ocurre cuando el estado se retrae en nombre de la “libertad de mercados”. No existe tal cosa ni existe la libre competencia. Ni en Estados Unidos, ni mucho menos en nuestros países. Sin un estado presente y alerta, los más grandes se terminan comiendo a los más chicos y la actividad económica se termina concentrando. El Poder Monopólico es el enemigo del sistema capitalista, justamente porque mata la competencia. Tanto en la producción como en la comercialización de los bienes y servicios. Se avecinan tiempos difíciles para nuestro país, después del saqueo y la transferencia de riqueza a unos pocos socios, amigos y parientes del presidente y sus ministros. Dejaron tierra arrasada. Solo con un Estado eficiente e inteligente (que no significa un estado pequeño y bobo) tenemos algunas chances de éxito. Santiago tiene mucho que decir, una vez más.

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