Argentina y Perú jugaron siempre partidos históricos y decisivos por las eliminatorias Sudamericanas. Desde aquella vez que los peruanos eliminaron a la selección nacional, jugando en la Bombonera en 1969 (2-2), al día de hoy, corrió mucha agua bajo el puente.
Quién no vio o escuchó hablar de la marca de Luis Reyna a Diego Maradona, en la previa de México '86, por ejemplo. Aquella vez, la marcación personal que le propinó el incaico a Diego fue brutal. Pese a que muchos hablaron de la limpieza de aquella marcación, el peruano en verdad utilizó argumentos fuera del reglamento: deslealtad, mala intención y una nunca vista reiteración de faltas para intentar frenar al crack argentino.
Días atrás se repitió, de alguna manera, una marcación similar, no por lo férrea, sino por lo inusual, en el partido entre Girona y Barcelona, en el fútbol español. Los protagonistas, en esta ocasión, fueron el español Pablo Mafeo y el argentino Lionel Messi.
El español, de 20 años, fue la sombra del rosarino durante los 90 minutos y, si bien no gravitó en el resultado (Barcelona ganó 3-0), si lo hizo en cuanto a la actuación de Messi. Mafeo lo "maniató", lo "sacó" del juego, al punto tal que en un momento Messi se puso a charlar con él, preguntándole cosas de su vida y demás, en medio del juego.
Los asistentes de Ricardo Gareca, entrendor argentino que dirige a Perú, tomaron nota de esta cuestión y ya estarían "adiestrando" a un jugador peruano para realizar dicha tarea, el próximo 5 de octubre. Eso al menos dicen los medios nacionales.
Difícil de creer, tratándose del "Tigre" Gareca, un gran entrenador que hace jugar muy bien a sus equipos. Uno no lo ve utilizando estas artimañas para ganar un partido o para conseguir un resultado satisfactorio...pero...
Claro que, ahora está en juego la clasificación al Mundial de Rusia 2018, nada más y nada menos. Entonces, ¿todo vale?
