Desde el jueves 9 de septiembre a las 20, en el Centro Cultural San Martín de la ciudad de Buenos Aires se podrá ver “Pompidú”, con José “El Purre” Giménez Zapiola y Malena Ratner, junto a Eugenia Bonel. Una obra escrita y dirigida por Catalina Piotti, en la que acercarán, desde la ficción, una mirada sobre la racionalidad, la realidad y la otredad.
Para hablar de este estreno, la actriz fue entrevistada por LV11 “La Radio de los Santiagueños”, donde comenzó refiriéndose al año anterior, cuando vivimos encerrados por la pandemia: “Es una felicidad, es como volver a la vida, porque la verdad fue un año muy difícil para todos los artistas, estamos volviendo a activar el teatro. Igual se necesita del apoyo de la gente porque el teatro fue uno de los rubros que más se vio afectado por la pandemia, porque se entiende que a la gente le da miedo salir, pero decirles de verdad que el teatro es un lugar seguro, con protocolo, y todo se lleva a cabo con toda la seguridad y la higiene que se necesita. Después muy contenta de que se hayan activado las series, obviamente la televisión, el cine, porque necesitaba de todo esto ya”, comenzó diciendo.
-¿De qué se trata este estreno “Pompidú”?
-Es una obra que nosotros es la primera vez que la vamos a hacer, entonces estamos muy expectantes por ver cómo va a reaccionar el público, muy ansiosos, muy felices de contar esta historia. “Cata”, que fue la que la escribió y dirigió, hizo un “laburazo” y nosotros tratamos de seguirla, muy ansiosos porque ya no queda nada para el estreno.
-¿Con quién te gustaría grabar una ficción?
-Mis dos actores favoritos que admiro mucho son los argentinos Pilar Gamboa y Rodrigo de la Serna, sería un aprendizaje y una experiencia increíble, los admiro mucho a los dos.
-Cómo es laburar con tu novio “El Purre”?
-Está siendo increíble, todo el mundo nos pregunta y nos dice “en qué se metieron”. Todos creen que se vienen los problemas, mezclar la pareja y el laburo no va, pero por suerte estamos muy bien. Los dos decidimos que a la hora de trabajar con un compañero, vos tenés que entablar una relación, un vínculo de confianza que en nosotros ese terreno ya estaba ganado, entonces fue como un plus. Entonces de ahí para arriba, sumar personajes, ensayar y obviamente todo el laboratorio que se hace previo a estrenar una obra. Nos estamos divirtiendo mucho, los dos somos muy intensos con el trabajo, sí es verdad que nos vamos del ensayo y seguimos en la cena hablando de la obra y de qué se puede mejorar, pero estamos muy felices y nos acompañamos mucho, por suerte estamos muy bien.
-¿Cómo llevas un noviazgo con mucha exposición?
-Al principio fue todo un tema porque era que no sabíamos cuándo comunicarlo, porque sabíamos que la gente no sospechaba que estábamos juntos, algunos sí, pero muy pocos, y una vez que lo digamos iba a explotar esa bomba de la que es muy difícil dar marcha atrás. También los dos estábamos con proyectos distintos y los fans de la pareja también tenían que estar informados. Sabíamos que iba a ser un poco bomba y tratamos de demorarlo lo más que pudimos por los dos, para que no sea algo que nos perjudique, pero después dijimos ya está, esto es parte de nuestras vidas y por qué no compartirlo.
Así que lo oficializamos. Ninguno de los dos necesitábamos ponerlo en redes, pero en cuarentena, encerrados, conviviendo en dos ambientes, era como imposible mantener el secreto y bueno dijimos “basta” y nos pusimos de acuerdo para subirlo el mismo día, pero yo dos días antes escribí una historia sin querer y se me escapó.
-La obra habla de problemáticas asociadas a la mente, ¿cómo es ingresar en ese universo? ¿Te gusta estar en propuestas que dejen un mensaje o contenido extra?
-Me gusta actuar para dar un mensaje y visibilizar cuestiones de la vida que quizás no están tan normalizadas. A mí me gusta ver obras, películas, series, basadas en hechos reales, y creo que con el lugar que ocupamos es una gran oportunidad para visibilizar cuestiones que no se trabajan tanto. En cuestiones de enfermedades mentales, aún hoy cuando alguien cuenta que toma pastillas, o que tiene alguna patología, se lo tilda de loco, etiquetan, titulan. Sería bueno que eso no siga pasando, porque hoy gracias a la ciencia la gente puede hacer una vida normal, claro que hay casos más graves, pero todo ha avanzado mucho.