Esta noche en el interior de nuestra provincia se vivirá una de las expresiones ancestrales y más inquietantes de la cultura popular. Son las “alumbradas”, donde de manera simbólica se pretende velar nuevamente a los difuntos, desde la tarde del 1 de noviembre, Día de Todos los Santos (para la Iglesia Católica) hasta el amanecer o más del día siguiente, 2 de noviembre, Día de los Fieles Difuntos, o como popularmente se conoce, Día de todos los Muertos o directamente el Día de los Muertos, lo cual no es más que una manera de recordar a los seres queridos que ya no se encuentran en este plano terrenal.
Lo que tiene en particular esta práctica que se asemeja en ciertos aspectos a la del Día de los Muertos de México, donde se rinde culto a los familiares y amigos difuntos, mediante un altar donde se colocan velas, alimento, flores, velas y sobre todo el retrato de la persona que ya no está en este plano para no olvidarse de ellos y tenerlos siempre presente.
Es por ello que es un acontecimiento social y un mandato cultural de dimensiones festivas acudir desde lejos a “alumbrar”, prender velas, llevar flores, reunirse alrededor de las tumbas de los seres queridos fallecidos, durante la noche en los cementerios rurales hasta el otro día.
Aquí en Santiago del Estero esta práctica se la puede observar en Ojo de Agua, en el cementerio de La Vuelta de la Barranca y en Maco en departamento Capital y Salavina.
“En Maco, niños y adultos llegan a reencontrarse después de muchos años, recuerdan a sus seres queridos prendiendo una vela, hasta cierta hora de la noche, luego regresan a sus hogares. En Salavina es distinto, ya que están las ‘rezadoras’, personajes que a través de cánticos y rezos efectúan un ritual casi tétrico. En cambio en Ojo de Agua, ya más urbanizado el cementerio tiende a ser más colorido”, remarco Ariel Roldán, profesor de Ciencias Sociales que junto a su compañera Silvia Starcich recopilaron información e investigaron sobre esta práctica de “La Alumbrada”.
En la vera de la ruta nacional N° 9, se realiza un operativo de seguridad, control de los puestos y demás requerimientos de las familias que realizaran “la alumbrada” esta noche.
En Ojo de Agua además hay hasta vendedores de todo tipo de artesanías, comida, y recuerdos para que la práctica que se lleve adelante tenga todo lo que necesiten las familias que se acercan al cementerio.