Puede que te quejas, porque Dios no te dio el rostro o el cuerpo que te hubiera gustado tener, pero si te dio salud, tienes mucho que agradecer. La historia que te contaremos a continuación, te dará una importante lección de vida. Se trata de Gemma Swift, una mujer que a los 6 años tuvo un accidente que dañó terriblemente su dentadura.
Debido a esa malformación, Gemma creció con muchísima inseguridad, pues todos sus compañeros le apodaron con nombres terribles como “la zombi”, “la muerta”, “la chica dientes”. El bullying que esta mujer experimentó fue tanto, que en más de una ocasión estuvo a punto de cometer suicidio.
Afortunadamente, Gemma se sometió a muchas operaciones de reconstrucción de rostro, ganando así más confianza en ella misma.
A pesar de que sentía que nunca tendría un rostro normal, Gemma se convirtió en una mujer muy sensible y muy inteligente, por lo que, al paso de los años, conoció a un hombre que se enamoró de su hermosa personalidad.
Lamentablemente, la ex de este joven molestaba a Gemma en sus redes social de manera muy ofensiva, por lo que Gemma decidió hacer algo fuera de lo común: enfrentarla en un programa de tv.
Desgraciadamente, como es común en las redes, la aparición pública de Gemma tuvo horribles consecuencias, pues muchas personas se burlaban de ella en las redes sociales.
Afortunadamente, el equipo del programa le consiguió dinero para que continuara con sus operaciones.
Después de algunos meses, Gemma se realizó la operación, y contenta con su nueva imagen, acudió al programa para que todos conocieran a la mujer en que se había convertido.
El cambio fue sorprendente. Gamma mantuvo su relación y hoy es más feliz que nunca, pues tiene muchísimo trabajo. Hoy importantes marcas de productos de higiene dental la han contratado para que de conferencias y por si fuera poco, se encuentra en un trato millonario para ser la vocera y representante de una importante aplicación de odontólogos y dentistas. No cabe duda que la mayoría de las veces, la vida nos regala una segunda oportunidad.
