Por pedro Arbona. Si alguna duda quedaba, Massa la diluyó con solvencia en el transcurso del debate de casi dos horas celebrado 14 días antes de las elecciones generales en nuestro país.
Categórico, solvente, coherente y siempre en eje temperamental y mesurado en actitud, el candidato a presidente de Unión por la Patria no solo delineó, lo que el tiempo de un programa de debate permite, su programa de gobierno en materia de trabajo y producción; seguridad, desarrollo humano, vivienda y protección del ambiente sino que además superó holgadamente las reiteradas “chicanas” con las que Bullrich y el resto de los candidatos procuraron descalificarlo.
Un apartado importante y que desbarató una de las discusiones más fuertes de la noche fue cuando anunció: “Vamos a encarar como segundo eje la lucha de política contra el crimen y en ese sentido vamos a crear una Agencia Federal con los mejores de cada una de las cuatro fuerzas federales. Sí, un FBI argentino, instalado en Central Córdoba en Rosario”, en relación a la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
O cuando paró en seco a Javier Milei y le dijo: "hasta acá llegaste, dejar de maltratar a las mujeres"; o cuando aseguró que incuirá a Hamas en la lista de organizaciones terroristas de nuestro país al tiempo de hablar de haber sido el impulsor de los juicios en ausencia.
Agudo y carismático, el tigrense mostró temple y experiencia de gobierno en un país al que volvió a convocar a la unidad desde la conformación de un gobierno integrado por las distintas fuerzas políticas.
Fue atacado por todos los flancos posibles. Jamás perdió la calma ni se mostró inseguro; por el contrario.
Bergman fue la misma del primer debate; Bullrich apareció sobreactudada al punto tal que tuvo que ser asistida por el SEASE por un problema en un ojo terminado el debate; Schiaretti fue más cordobés que nunca y Javier Milei por momentos quiso retomar el personaje que había perdido en el primer debate pero cometió muchas imprecisiones tanto en lo discursivo como en las cuestiones “de fondo”.
Algunos analistas presagiaban tal vez tempranamente un escenario de ballotage al término del programa. Entre Sergio Massa y Javier Milei frente a una Bullrich que no pudo recuperar puntos ni en éste ni en el anterior.
