En la tarde del día 17 de mayo, en la sede de la Embajada Argentina en Washington DC, tuvo lugar un encuentro interreligioso en conmemoración del décimo aniversario del Pontificado del Papa Francisco, al que asistieron figuras relevantes del ámbito local, incluyendo más de una decena de Embajadores acreditados en esta ciudad.
Aprovechando la reciente publicación por la Secretaría de Culto de la Cancillería Argentina, del libro “Diálogos Fraternos”, la conversación entre representantes de diversas religiones fue inspirada por la Encícilica Frattelli Tutti, alrededor de la fraternidad y la amistad social.
La actividad comenzó con los comentarios introductorios del Embajador Especial de EEUU para la Libertad Religiosa Internacional, Rashad Hussain, y del Nuncio Apostólico en los Estados Unidos, Christophe Pierre.
A continuación, el Embajador Jorge Argüello dio apertura y moderó el intercambio de ideas entre los ilustres participantes: el Cardenal Wilton Gregory, Arzobispo de Washington DC; el Rabino Abraham Skorka, rector emérito del Seminario Rabínico Latinoamericano y coautor junto a su amigo el Papa Francisco del libro “Sobre el cielo y la tierra”; el Imán Talib Sharif, Presidente e Imán de la Mezquita Nacional de Washington DC; Mythili “Lee” Bachu, titular del Consejo Interreligioso de Washington y practicante hinduista; y Allyson Chard, miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El Embajador Argüello comenzó llamando a la amistad y al diálogo. “No es coincidencia que el Papa Francisco haya hecho del diálogo interreligioso une eje sustantivo de su pontificado. En la Argentina tenemos una rica historia de integración intercultural e interreligiosa; nuestros líderes religiosos han sido piezas clave para lograr este objetivo y sin duda el Papa Francisco ha sido un gran referente en ese sentido”.
Los líderes religiosos intercambiaron conceptos en un formato de conversación, valorando desde sus diversas perspectivas las contribuciones del Papa Francisco y la importancia de la “cultura del encuentro” y la construcción de puentes entre las distintas religiones. El Cardenal Gregory, sobre el final del diálogo, sostuvo: “hay esperanza”.
Por último, el Embajador Argüello agradeció la inspiración de los participantes e hizo un llamado a trabajar conjuntamente para que el deseo de Frattelli Tutti se haga realidad: habitar un mundo en el que todos somos hermanos y hermanas.
