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El País #Economía

La CGT vaticina un derrumbe social y brega por una urgente recomposición económica

El organismo lanzó una dura advertencia y especificó que ya no hay margen de error de deterioro económico sin riesgo de una "descomposición social".

La Confederación General del Trabajo (CGT), principal central obrera de la Nación, expresó su preocupación por el deterioro económico y social acelerado que enfrenta el país como resultado de la crisis actual. En un borrador de un documento que fue filtrado a la prensa y que se espera sea presentado oficialmente después de la reunión del Consejo Directivo de la CGT, destacaron la necesidad de adoptar medidas y acciones urgentes para abordar los índices de inflación y pobreza, que se han convertido en las principales preocupaciones en el contexto económico y social del país.

 

Uno de los principales llamados de la CGT es a la convocatoria de un consenso político, económico y social con el objetivo de alcanzar acuerdos para un programa de mediano y largo plazo que promueva el desarrollo, la producción y el trabajo como instrumentos necesarios y urgentes para superar la crisis y establecer un horizonte de crecimiento con justicia social. Enfatiza que la situación económica y social es de tal gravedad que no permite especulaciones personalistas ni sectoriales, y que solo a través de la instrumentación de consensos mayoritarios con base en políticas de Estado se podrá salir de la actual crisis.

 

En su análisis de la coyuntura del país, la CGT destaca que la sociedad argentina enfrenta una compleja crisis económica y social, heredada y agravada por un escenario de inestabilidad macroeconómica que se manifiesta en una escalada inflacionaria creciente que afecta el poder adquisitivo de los salarios, la escasez de divisas, la informalidad laboral y el aumento de la pobreza estructural, que ha alcanzado a un 40% de la población, condenando a millones de argentinos y argentinas a la marginalidad y poniendo en riesgo la cohesión social.

 

En este contexto, reclamaron a la dirigencia política, sin importar sus diferencias partidarias, a asumir la responsabilidad que les corresponde en la sucesión de crisis recurrentes que ha llevado al país a la situación actual.

 

Uno de los principales pedidos de la CGT es reducir los actuales índices de inflación, que consideran un verdadero impuesto a la pobreza que deteriora los salarios y afecta la previsibilidad en materia de inversiones, impactando negativamente en todas las variables económicas. También hacen hincapié en la defensa del aparato productivo nacional y la implementación de políticas que promuevan el empleo genuino, así como el fomento del trabajo argentino a través de prácticas exportadoras con valor agregado.

 

Por otra parte, demandan el fortalecimiento de los sistemas de salud y seguridad social, la promoción de un proceso de movilidad social ascendente y de una justa redistribución de la riqueza que revierta la concentración del ingreso y promueva el equilibrio en la relación capital-trabajo.

 

Según trascendió, este borrador del documento que la CGT va a difundir este jueves tras la reunión del Consejo Directivo no es la versión final, e incluso aún se encuentran en discusión algunos puntos entre los líderes sindicales.

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