El régimen de Irán lanzó una nueva ola de misiles contra Israel durante la madrugada y mañana del sábado, en el cierre de una noche marcada por explosiones en Tel Aviv, Jerusalén y Teherán.
La ofensiva ocurre un día después de un ataque aéreo sin precedentes de Israel contra instalaciones nucleares y militares en territorio iraní, en el que utilizó aviones de combate y drones introducidos previamente de contrabando en la República Islámica para golpear objetivos clave y abatir a altos generales y científicos. Israel alegó que el bombardeo era necesario para impedir que su adversario desarrollara un arma nuclear.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió que “hay más en camino”, mientras el ministro de Defensa señaló que Irán “cruzó líneas rojas”.
Por su parte, el régimen iraní prometió una “respuesta aplastante” y declaró que intensificará sus ataques.
"Irán arderá"
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, advirtió que “Teherán arderá” si Irán dispara más misiles contra Israel, en un intercambio de disparos entre los archienemigos por segundo día consecutivo.
“El dictador iraní está convirtiendo a los ciudadanos de Irán en rehenes y generando una realidad en la que ellos, especialmente los residentes de Teherán, pagarán un alto precio por los daños criminales causados a los civiles israelíes”, declaró Katz.
“Si (el ayatolá Ali) Khamenei continúa disparando misiles contra el frente interno israelí, Teherán arderá”, afirmó.
Tres muertos en Israel
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que Irán disparó unos 200 misiles balísticos contra Israel.
La mayoría de los misiles fueron interceptados por las defensas aéreas. El Ejército afirmó que alrededor del 25% no fueron interceptados “según el protocolo”, lo que les permitió atacar zonas abiertas sin causar daños a ninguna infraestructura crítica.
Un “pequeño número” de misiles logró atravesar las defensas aéreas, según las FDI; y causó víctimas y daños, incluso en zonas residenciales de Tel Aviv, Ramat Gan y Rishon Lezion en el centro de Israel.
Tres israelíes murieron y unos 70 resultaron heridos en los impactos de los misiles.
El Ejército dijo que todas sus bases, incluidas las aéreas, están operando normalmente sin que se vea perjudicada su funcionalidad.