Recientemente se difundió un video en el que se puede ver a dos jóvenes de 20 y 23 años que fueron detenidos en marzo en Aceh, Indonesia, ya que fueron acusados por sus vecinos de ser gays.
Tras ser encerrados, un “tribunal” islámico decidió sentenciarlos a recibir 83 azotes cada uno. El castigo fue ejecutado en el transcurso de esta semana en el exterior de una mezquita, frente a una multitud que se burlaba y filmaba con sus teléfonos, publica el canal de noticias TN en uno de sus blogs.