Lucas Bernabéu, jugador de Belgrano de Córdoba, defensor (central) y santiagueño, quien hace poco debutó en primera división, visitó este pasado jueves Radio LV11 y mantuvo una entretenida charla con "El Deportivo" (conducido por Alfonso Díaz y Gabriela Basualdo), en la que se refirió a su presente.
-En estas vacaciones me tocó venir hace dos semanas. Me tocó debutar en la tercera convocatoria que tuve. El año pasado me tocó la primera vez, después este año en la Sudamericana, y ahora debuté con Huracán. Se dio una situación de que llevamos muchos chicos de la Reserva y había muy pocos centrales. Ya existía la posibilidad de que yo juegue, pero me enteré recién en el banco que muy probablemente entrara en el segundo tiempo. Entré tranquilo, sin nerviosismo.
-Yo tengo que estar allá en Córdoba el 26 de diciembre, paso ahí Navidad y Año Nuevo. Estas dos semanas en Santiago las pasé entrenando. Trabajo, voy creciendo día a día.
-Estás en Córdoba desde los 13 años, siempre en Belgrano...
-Sí. En realidad, antes jugué en Unión de Santa Fe, ahí tuve el proceso de los 9 hasta los 11 o 12; y después, por cosas de la vida, terminé en Belgrano a los 13 años.
-Por la tonada cordobesa, imagino que ya no debes decir "chango"
-No, sí me queda. Me pasa sobre todo cuando vuelvo a Santiago. Cuando hablo con mis viejos. Vuelvo aquí y me transformo. Me queda también la siesta, la cantidad de siesta que duermo allá es increíble. Hasta el año pasado viví en pensión, hoy estoy en un departamento, en General Paz. Fue un cambio muy esperado. Uno se hace más grande y necesita más su intimidad.
-A los 13 te fuiste solo a otra provincia, ¿cómo fue eso?
-Era algo que quería, porque al fútbol lo amo y estaba decidido a irme. Pero a mis viejos les pegó bastante. Mi mamá me quiso llevar dos veces a la psicóloga. Fui la primera vez, me fue bien, y la segunda vez sale la psicóloga conmigo y le dice a ella: 'Yo creo que el chico está decidido a irse, si querés organizamos una reunión con vos'.
-No, de la escuelita de Santiago me fui de 5. Pasa que después empecé a crecer y 'me tiraron para atrás', digamos. Veo que hay muchos equipos, o muchos juveniles, que tiran los 5 a ser centrales. Los bajan por la salida, por su control de pelota, por la visión de juego que tienen.
-¿Quién es tu referente, en tu posición?
-Hoy en día lo miro mucho a Cuti (Romero), a Otamendi. Cuti es 'una bestia', es increíble. Lo ves entrenar y ya tiene cosas distintas.