El árbitro Nicolás Ramírez será el juez principal de la final de la Copa de la Liga Profesional 2024, en la que se enfrentarán Vélez y Estudiantes de La Plata el próximo domingo en Santiago del Estero según informó este jueves la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).
El encuentro tendrá lugar desde las 15:30, en el estadio Único Madre de Ciudades y, junto con Ramírez, estarán Maximiliano Del Yesso como asistente 1, Sebastián Raineri como asistente 2, y Leandro Rey Hilfer junto a Pablo González como cuarto y quinto árbitro, respectivamente.
Nicolás Ramírez dirigirá la final el domingo. Estaba en la nómina para ser el juez del Superclásico pero se lesionó y tampoco fue designado para dirigir los cuartos de final ni las semifinales de la Copa de la Liga.
El que jugará un papel importante también será Héctor Paletta, quien estará a cargo del VAR desde Ezeiza y contará con la asistencia de Pablo Dóvalo como AVAR. Alejandro Mazza será el Quality Manager.
La Comisión Arbitral de AFA lo designó para este duelo luego de no haberlo asignado a ninguno de los partidos de esta fase decisiva de la Copa de la Liga Profesional, ya que, en los cuartos de final estuvieron Yael Falcón Pérez en el Superclásico, Darío Herrera en Barracas Central-Estudiantes (LP), Sebastián Zunino en Godoy Cruz-Vélez y Andrés Merlos en Argentinos Juniors-Defensa y Justicia. Ya en semifinales, Nazareno Arasa había tenido a su cargo el Estudiantes-Boca y Facundo Tello el designado para Argentinos Juniors-Vélez.
Sin Superclásico
Nicolás Ramírez tuvo a su cargo como árbitro principal siete encuentros en la Copa de la Liga y no pudo dirigir el Superclásico entre River y Boca por la séptima fecha debido a que se lesionó en la jornada anterior.
En este certamen dirigió como principal: Instituto-Deportivo Riestra, Gimnasia-Independiente Rivadavia de Mendoza, Estudiantes-Racing, Huracán-Independiente, Deportivo Riestra-Vélez, San Lorenzo-Tigre e Independiente-Talleres de Córdoba.
Este último fue su regreso a dirigir luego de cinco jornadas en el VAR mientras se recuperaba de su lesión y, en el Estadio Libertadores de América de Avellaneda, este duelo con el empate 2-2 determinó la eliminación de ambos para los cuartos de final del certamen.
