
Siempre que llovió, paró. Después de sufrir un derrotero de casi tres meses de muchas tempestades, el sol salió para Central Córdoba, que en la décima fecha del campeonato salió de perdedor y logró su primer triunfo en la Liga Profesional, al ganarle con claridad y merecimiento a Defensa y Justicia por 2 a 0.
Rafael Barrios en el primer tiempo y Matías Godoy en el complemento, marcaron los goles del equipo de Omar De Felippe, que mostró otra cara y le devolvió la ilusión al hincha de que el equipo “está vivo" y de que peleará por lograr la permanencia en la categoría.
El partido
El primer tiempo, en líneas generales, fue de Central Córdoba, que salió con otra actitud, trató de presionar bien arriba y logró generar varias aproximaciones en el arco defendido por Fiermarin.
Un remate de Atencio desde la derecha que contuvo el arquero visitante, una llegada a fondo de Godoy, tras un centro desde la derecha, y un tiro libre de Atencio que picó antes del cuerpo de Fiermarin y exigió una gran atajada del “1” del halcón, fueron las mejores jugadas del local; que controló muy bien a su rival y que ya merecía algo más. Pasados los 20 minutos, tras un tiro libre de Cabrera que rebotó en la barrera, Cristián Vega recibió solo sobre la derecha, remató fuerte y cruzado, Fiermarin dio un rebote largo y Rafael Barrios capturó el rebote para el 1-0.
Después de ese tanto, a Defensa le costó asimilar el golpe, pero de a poco comenzó a adelantarse en el terreno de juego. Tuvo una chance clara, sobre los 42 minutos, con un centro cruzado que no pudo empalmar bien Osorio y el balón terminó en las manos de Ingolotti.
El complemento se inició con un contraataque a fondo de Atencio y una definición defectuosa de Godoy. A renglón seguido, Barrios escaló por derecha, intentó un centro y el balón se estrelló en el travesaño. Pese a que Defensa intentaba presionar arriba, lo de Central era mucho más peligroso y lo iría a ratificar unos segundos después. Gran jugada de Atencio, apertura para la izquierda para Godoy, control y chanfle perfecto al segundo palo. Golazo. Dos a cero.
Ese gol fue un mazazo para Defensa y Justicia, que sin lugar a dudas atraviesa su peor momento futbolístico y anímico. Ni las variantes introducidas por el DT Meneghini lograron una reacción en el visitante. Y Central, de contraataque, pudo marcar el tercero y el cuarto, pero evidentemente Lucas Varaldo no es un goleador y, además de eso, tampoco está con confianza para la definición. Falló dos muy claras. Si Central pretende seguir con su escalada, debe conseguir urgente un centrodelantero que la empuje al gol. Sino se le hará muy cuesta arriba.
Del medio hacia atrás, De Felippe lo acomodó bastante bien al equipo y su primera valla en cero en el campeonato es un premio grande, como lograr una medalla de oro en los Juegos Olímpicos.