Serbia sorprendió a Canadá (95-86) y se clasificó para la final del Mundial de básquet por primera vez desde 2014, este viernes en Manila, gracias a una exhibición desde la larga distancia.
El equipo balcánico se enfrentará el domingo al vencedor del duelo entre Estados Unidos y Alemania, que juegan también este viernes.
Serbia precisamente perdió contra Estados Unidos en su última final, en España-2014.
Este viernes, en el Mall of Asia Arena, dominó completamente al combinado canadiense, entrenado por el español Jordi Fernández y presente por primera vez en las semifinales del gran torneo de naciones.
Aplicados y agresivos en defensa, decantaron el partido por su acierto en el tiro (36/58, 62%), especialmente desde el triple (9/20). Al descanso los serbios ya dominaban con autoridad (52-39), distancia mantenida tras el tercer cuarto (75-63).
Canadá pagó caro las faltas rápidas de sus dos referentes, Dillon Brooks (la cuarta en el minuto 24) y Shai Gilgeous-Alexander (la tercera en el 19), entregando el partido cuando quedaban más de dos minutos.
Serbia estuvo de nueva liderada por su alero Bogdan Bogdanovic (24 pts, 3/4 en triples, 3 robos, 28 de valoración).
Gilgeous-Alexander, otra de las gran estrellas del torneo, falló el gran día, aunque aportó 15 puntos y 9 asistencias.
