Hoy, a la hora de la llegada del vuelo que arribó antes de las 14, la sala de espera del Aeropuerto Vicomodoro Ángel de la Paz Aragonés fue copado por taekwondistas locales y amigos del campeón mundial Matías Ríos Olivero, con banderas de Argentina y cientos de globos celeste y blanco, además de carteles con la palabra "BienvenIdo campeón Mundial".
Cuando hizo la aparición Ríos Olivero, estalló el grito de “Dale campeón, dale campeón", con saltos, abrazos y lágrimas de emoción. Y el primer abrazo del campeón fue con su esposa y sus dos pequeñas hijas, Delfina y Estrella.
Fueron varios minutos de felicitaciones y abrazos del campeón con cada uno. “Muchas gracias a todos. Mil gracias Nuevo Diario por reflejar paso a paso el Mundial”, expresó el campeón.
También estuvo el médico pediatra Manuel Barthe. “Matías fue mi paciente. Estoy feliz. Todo un hombre, aunque para mí sigue siendo mi paciente (sonrisas)” cerró.