Durante la primera jornada del Mundial de Atletismo de Budapest, Álvaro Martín ganó la primera medalla de oro para España, destacando en la prueba de los 20 kilómetros marcha con un tiempo de 1 hora, 17 minutos y 32 segundos. Martín no solo se alzó con la victoria, sino que también hizo historia al convertirse en el tercer español en ganar un título mundial en esta disciplina.
La plata quedó en manos del sueco Perseus Karlström, quien demostró su destreza en la pista en una competencia reñida. El podio se completó con la presencia del brasileño Caio Bonfim, cuyo esfuerzo y habilidades le aseguraron la medalla de bronce.
La competición comenzó con cincuenta marchadores representando a veintiocho países, congregados en la emblemática Plaza de los Héroes de Budapest. Sin embargo, debido a las inclemencias climáticas, el evento sufrió un retraso de dos horas en relación con el horario previsto. A pesar de los obstáculos, los atletas finalmente se alinearon en la salida para enfrentar un recorrido céntrico de un kilómetro, que repitieron veinte veces a lo largo de la calle Andrassy.
