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Deportes #LigaProfesional

Media hora de locura e ira de los hinchas en el Central Córdoba - Atlético Tucumán

Los tucumanos se quisieron "infiltrar" entre santiagueños y hubo peleas en el "Madre de Ciudades".

El encuentro que protagonizaron Central Córdoba y Atlético Tucumán se vio demorado un poco más de media hora, luego de que los hinchas protagonizaran un lamentable hecho de violencia, cuando transcurrían 10 minutos de la primera etapa.

 

Antes de eso, en el ingreso de los hinchas visitantes, también se registraron incidentes con la policía, porque los tucumanos se llevaron por delante las vallas.

 

 

En los primeros instantes del cotejo, los incidentes comenzaron a registrarse en el sector de la platea alta Este.  Allí, los parciales del "ferroviario" detectaron que había hinchas del equipo tucumano infiltrados en ese sector, provocando y haciendo gestos obscenos en el marco de la "rivalidad" existente.

 

Esta decisión generó una serie de corridas por parte de algunas personas y los simpatizantes de la visita se alojaron en un costado para resguardarse de cualquier represalia, mientras que los jugadores de ambos conjuntos se acercaron para pedir tranquilidad con la iniciativa de volver a jugar el encuentro.

 

 

Sin embargo, la preocupación fue en aumento en Atlético Tucumán, cuando observaron que entre toda la gente que estaba siendo "desalojada" se encontraban algunos familiares en las butacas. La temperatura fue elevándose en las gradas y se trasladó a la popular, donde estaban los neutrales, quienes primero se trenzaron con los cuatro o cinco policías que se encontraban en ese "flaco" cordón, y luego intentaron voltear la reja metálica que separa un sector del otro. Por suerte esto no pasó.

 

 

Parte de la parcialidad de Central Córdoba, ubicada en la popular Norte, cruzó hacia la platea alta Este, para intervenir.

 

En ese momento apareció un grupo de unos diez policías que logró armar un cordón y pudo contener o calmar a los violentos.  Tras el primer gol de los tucumanos, también hubo escenas de pugilato, pero esta vez en el sector de los palcos. Los visitantes se abusaron en los festejos y mofaron de sus pares y ahí generaron otro foco de violencia.

 

Un triste espectáculo para un partido de fútbol que fue sinceramente muy pobre.

Central Córdoba
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