Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Deportes #Entrevista

Marcelo Ledesma, un mediocampista que jugó en todos lados

Surgió en Mitre y se dio el gusto de jugar en el fútbol grande. Repasó su gran carrera.

Fue uno de los mejores mediocampistas que tuvo nuestro fútbol. Surgió en el Club Atlético Mitre y luego dio el salto para jugar en el fútbol grande con las camisetas de Estudiantes de La Plata, Banfield y el Deportivo Español en su mejor momento. También jugó afuera del país, como en Grecia, Italia y Chile y disputó un Nacional B con Central Córdoba. Es decir que Marcelo “Maqueco” Ledesma dejó su sello y un gran recuerdo a donde estuvo. Nacido el 2 de abril de 1970, el exmediocampista repasó su gran carrera.

 

Se retiró en el “aurinegro” en 2005, donde también dio sus primeros pasos como entrenador.

 

 

– ¿Dónde fueron tus inicios?

– Mis inicios fueron en los torneos de baby fútbol. La pasión que uno tiene por el fútbol viene desde que tengo uso de razón. Los baby eran espectaculares y había muchos captadores de  talentos, algo que hoy no hay más. Mientras que las divisiones inferiores las hice en Mitre.

 

 

 – ¿Por cuántos clubes pasaste?

– Fueron 13 clubes por los que pasé en mi carrera: Mitre, Central Córdoba, Racing de Córdoba, Huracán, Deportivo Español, Banfield,  Estudiantes de La Plata,  Dock Sud, Ionikos (Grecia), Palestino de Chile, Monza, Pro Sesto y Us Ariano Calcio (estos tres últimos de Italia).

 

 

– ¿Qué es lo que más extrañas de tu carrera?

– Se extraña todo. Considero que tuve dos vidas. Una cuando fui jugador de fútbol y después de ello comenzó una nueva etapa, un nuevo camino y la manera de cómo enfrentar la vida, algo que no es fácil para un futbolista profesional cuando se retira. A la mayoría le cuesta. Pero se extraña todo y como dice Valdano, uno sigue teniendo sueños con el fútbol porque está dentro de uno.

 

 

– ¿En dónde pasaste tus mejores momentos?

– En todos los clubes donde jugué. Hacía lo que soñé desde chico y estuve en los lugares que tanto deseaba. La pasé bien en todos lados.

 

 

– ¿Qué recuerdas de tus pasos por Estudiantes y Banfield?

– Son dos clubes maravillosos y que hoy en día crecieron mucho más en infraestructura. Son clubes modelos en el país. A Banfield me llevó de refuerzo Oscar López, a quien lo había tenido en Deportivo Español. Mientras que al “pincha” fui por intermedio de una charla con el “Profe” Córdoba, quien me quería observar en unos entrenamientos y firmé contrato.

 

 

– Jugar en la vereda de enfrente, como lo es Central Córdoba, ¿era complicado en esa época?

– Jugar en Central Córdoba fue complicado. Ir del rival de toda la vida no fue fácil, pero me fue bien y pude jugar el Nacional B.

 

 

– Estuvieron muy cerca de ascender con Mitre al Nacional B en 1990...

– Sí, muy cerca. Creo que ahora hay un crecimiento a nivel dirigencial, hasta de los mismos hinchas. Los tiempos cambian. El dirigente empezó a mirar más allá y este crecimiento es propio del fútbol, con el gran apoyo del Gobierno de la Provincia, cosa que en nuestro momento lo padecimos cuando jugábamos en Mitre. Teníamos para llegar de manera fácil al Nacional B, pero nos faltó ese apoyo fundamental. Una cosa trae la otra. El hecho de que hoy estén los equipos grandes de la provincia en el fútbol grande, mejora la cabeza del dirigente y la de los jugadores.

 

 

– ¿Cuál es la anécdota que más recuerdas?

– Recuerdo una cuando Racing de Córdoba le compró mi pase a Mitre, al mes tenía la posibilidad de venderme y en ese momento estaban varios interesados en mí (Belgrano, Huracán, San Lorenzo, Necaxa). También se hablaba de Colón en su momento. Pasó de todo y había un tironeo de todos los equipos por mí. Todo ello me generaba felicidad y a la vez un poco de angustia porque no sabía qué camino tomar. Todas eran buenas opciones y al final de la historia entrené dos días en San Lorenzo, estuve en el hotel concentrando. Pero después me fui a Huracán y terminé jugando el clásico en cancha de River. Una cosa de locos.

 

 

– ¿Tu mejor entrenador?

– De todos uno aprende bastante. Tuve la suerte de que me dirijan técnicos campeones del mundo, pero tampoco me puedo olvidar de los técnicos de mis inicios, quienes me guiaron mucho. Cuando lo tuve a Oscar López lo vi diferente al fútbol y comencé a jugar de manera distinta. Lo tuve en Banfield y en Deportivo Español.  

 

 

– ¿Un compañero?

– Es difícil elegir uno porque en todos lados tuve grandes compañeros. Por lo general los jugadores de fútbol son buena gente porque la mayoría son muchachos que la pelean de abajo. Por ejemplo en Mitre había un grupo excelente, todos tiraban para el mismo lado y la pasábamos muy bien. En Estudiantes lo tuve a José Luis Villarreal.

 

 

– ¿Tu mejor partido o un gol?

– Recuerdo mucho un gol en un clásico que le marqué a Central Córdoba. Tenía apenas 17 años. Sentí una alegría inmensa por marcarle al rival de toda la vida, fue increíble. Después anoté en un clásico de La Plata con Estudiantes. Momentos inolvidables.

 

 

– ¿Recuerdas cuántos títulos festejaste?

– Tuve la suerte de ganar varios campeonatos con Mitre como jugador. También fui campeón como ayudante de campo de Donaires en 2009. Me acuerdo que le ganamos una final infartante a Sarmiento, por penales. Otro torneo que me llenó de alegría fue cuando estuve con Fernando Donaires en Vélez de San Ramón. No es nada fácil ascender de un Argentino B al Argentino A. Lo hicimos con todos los jugadores santiagueños y con humildad.

 

 

– ¿El jugador que más te impresionó?

– Dos: René Bravo y José Luis Villarreal.

 

 

– Fuiste técnico en Mitre y ayudante de campo, ¿te gustaría volver a dirigir?

– La verdad que sí, me gustaría volver a dirigir. Sin embargo, hay cosas que pasaron que muchos no te las agradecen. Fui técnico de Mitre en un tiempo que era un desastre a nivel institucional, no había plata, los jugadores jugaban gratis y así se hacía difícil. Mitre era candidato a irse al descenso a la Primera B de la liga y estoy agradecido a esos muchachos que en ese 2006 le pusieron el pecho y evitaron que pase eso. Demostraron ser hinchas del club, como yo lo hice en ese momento, cuando en realidad nadie se quería hacer cargo. Salvar ese barco que se estaba hundiendo era duro y lo logramos.

 

 

– ¿Messi o Maradona?

– Me quedo con los dos. Es una bendición ser argentino, que te guste el fútbol y tener la fortuna de contar con Messi y Maradona. No los comparo, para mí los dos son los más grandes.

 

 

– ¿A qué te dedicas?

– Hace muchos años que trabajo en el Consejo Provincial de Vialidad.  Como lo dije, uno vivió dos capítulos en esta vida. En esta etapa encontré un grupo maravilloso de compañeros en el fútbol amateur y gracias a ellos conseguí mi trabajo. 

Seguí a Nuevo Diario Web en google news
Comentarios

Te puede interesar

Teclas de acceso