Walter Omar Jiménez fue el gran goleador de Central Córdoba durante la década del 90. El “Suri” tuvo una gran temporada durante el Nacional B 86/87 y en el 87/88, y fue visto por varios clubes, pero finalmente emigró a Atlético Tucumán, donde también fue una figura gracias a sus goles. Y por supuesto, ayer no podía faltar al cierre de los festejos por el centenario de la entidad del oeste. Jugó el primer tiempo en el duelo entre las viejas glorias del “ferro” y Central Argentino.
“Estoy muy contento después de haber participado de estos festejos. Volver a jugar con muchos excompañeros y ahora amigos, es gratificante. Que los directivos del club nos tengan en cuenta es algo que nos llena de emoción y orgullo”, aseguró.
Y admitió que “formar parte de una rica historia, en un club tan grande como Central Córdoba, también es algo que para mí es muy lindo. Además, haber sido acompañado por mi familia es una caricia al alma”.
Y se mostró con sensaciones encontradas por lo vivido ayer y por el momento actual en lo deportivo en la Superliga. “Esto es emotivo, pero a la vez me siento un poco triste porque no estamos bien en la Superliga. Tengo fe que las cosas se van a revertir. Debemos seguir en Primera porque somos una institución de Primera”, advirtió el otrora goleador “ferroviario”, que fue una de las estrellas que brilló ayer en el firmamento del oeste.
Por otra parte, valoró el aporte del Multimedio Nuevo Diario-LV11 por haber sido el organizador de este evento, que, en forma conjunta, lo hizo con el club Central Córdoba. “Quiero agradecer a Nuevo Diario por haber sido una parte de la organización de este partido y de los actos por el cierre del centenario. Es un placer haber levantado esta Copa que llevó su nombre. Es un medio que siempre nos acompañó y que nos permitió volver a juntarnos con las glorias de este club. Eso sí, cuando entramos a la cancha lo hacemos para ganar como hace 30 años”, concluyó.