Este martes 24 de junio, Salta amaneció congelada con una sensación térmica de -6°C que sorprendió incluso a los más habituados al invierno. Aunque el pronóstico preveía una mínima de 0°C, el termómetro descendió por debajo de lo esperado y marcó -2°C reales, provocando una ola de escarcha sobre vehículos, viviendas, arbustos y calles de toda la ciudad.

Los indicios del descenso térmico comenzaron a evidenciarse desde la noche del lunes, cuando el termómetro ya marcaba 0°C y la térmica caía a -1°C. Sin embargo, cerca de las 6 de la mañana, las estaciones meteorológicas locales reportaron térmicas de hasta -7°C en zonas periféricas.

La imagen al despertar fue inequívoca: automóviles cubiertos de hielo, ventanas exteriores empañadas y congeladas, techos de chapa escarchados, pasto blanco y arbustos cristalizados por la helada. Una postal típica de zonas cordilleranas que, con la aparición del sol, comenzó a transformarse con el goteo característico del descongelamiento.

Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la máxima prevista para hoy es de 16°C, aunque los especialistas señalaron cierta incertidumbre respecto a si ese valor podrá alcanzarse, debido a la baja temperatura de arranque. A las 7:40, los datos oficiales todavía indicaban -2°C con una sensación térmica de -3°C.

Con estos registros, Salta vivió la mañana más fría del año 2025, superando marcas anteriores que apenas habían llegado a -1°C. Ante este escenario, las autoridades sanitarias recomendaron extremar precauciones, especialmente para niños, adultos mayores y personas con enfermedades respiratorias, así como garantizar el uso responsable de estufas y calefactores para evitar riesgos por monóxido de carbono.