“Bueno, muchachos: me acaban de echar. Les deseo lo mejor y sigan para adelante”. Con esa frase corta, directa y sin vueltas, Fernando Gago le informó al plantel de Boca que había sido despedido de su cargo después de la dura derrota en el Superclásico ante River.

La intimidad fue revelada por el periodista César Luis Merlo, quien además explicó que al DT le comunicaron la decisión este martes bien temprano, ya que el lunes no se pudo coordinar por cuestiones de agenda y porque el Consejo de Fútbol terminó de definir su salida durante la noche.

La caída por 2-1 en el Monumental fue la gota que rebalsó el vaso en un ciclo que venía tambaleando. El golpe fue durísimo y se sumó a otras decepciones que el club no pudo digerir: la eliminación en Copa Libertadores ante Alianza Lima en la segunda fase y la semi perdida 4-3 ante Vélez en semifinales de Copa Argentina, que dejó al equipo sin títulos ni consuelo.