Tute, hijo de Caloi y heredero de un importante legado artístico y cultural, llegó a Santiago del Estero para presentar su libro “Lo mejor de Tute”, que es una recopilación de sus mejores viñetas a lo largo de sus años de trayectoria, donde contó historias que conectan con nuestra realidad, provocando tanto risas como reflexiones profundas.
Durante la tercera jornada de la Feria Provincial del Libro, una de las actividades fue “El arte de contar la realidad, la historieta como voz social”, a cargo del humorista gráfico y artista argentino. A pleno total, la sala Canal Feijoó del Fórum Centro de Convenciones recibió al historietista que transforma lo cotidiano en algo extraordinario, quien recibió más que elogios y una ovación total por parte de los presentes.
Filosofía y política
“Creo que este Gobierno es inédito, el primero de su tipo me parece, es brutalmente sincero, además de ser loco, insensible y canallesco. Después, sobre lo que hago en mi trabajo, es también uno de los caminos que elegí y esta hermandad que siempre trazo entre el humor gráfico, la poesía que comparten con el psicoanálisis y la filosofía y la capacidad de síntesis, porque el humor necesita síntesis para tener potencia”, planteó.
“Entonces, eso es muy importante y eso se aprende mucho de la poesía. La poesía es síntesis, es musicalidad. Incluso, hay viñetas que ni siquiera tienen diálogos, porque hay silencios que dicen mucho”, subrayó.
El rol de la cultura
En cuanto al rol de la cultura y las personas frente a ello, teniendo en cuenta el contexto actual, planteó: “Me parece que hoy nos toca resistir. El arte tiene dos trabajos importantes hoy: por un lado, el de resistencia, el continuar siendo una voz social; por otro lado, ser el refugio. Yo cuando estoy mal me refugio en los poetas”.
“Pensemos un poco en nuestra historia y en la historia del mundo, las mayores expresiones culturales se han dado en épocas de crisis, cuanto más intenten callar a los artistas más fuerte será su voz. Hoy lo que se intenta hacer es dar una batalla cultural para quitar de raíz las tradiciones de los pueblos, entonces nosotros tenemos que intentar que eso no suceda y celebrar las cosas que nos parecen importantes como esta feria”, puntualizó.
“Nunca hubo tanto arte callejero, obras de arte o arte en los murales que en 2002, por ejemplo, porque el arte e incluso el humor son formas de resistencia. Se necesita la risa para sobrellevar grandes crisis”, destacó.
El encuentro fue una ocasión única, no solo para los seguidores de su obra, sino también para estudiantes, jóvenes curiosos y amantes del arte en general. En esta charla, Tute compartió sus experiencias, sus motivaciones, mostrando cómo el arte puede ser un canal de expresión para la reflexión y el cambio.