En representación de la Arquidiócesis de Santiago del Estero, el arzobispo Vicente Bokalic estuvo presente en la habilitación del Centro Convivencial La Granja Señor de los Milagros de Mailín en el barrio San Germés, que funcionará como el último paso de la rehabilitación de jóvenes en adicción.

Al referirse a este espacio y el trabajo realizado junto con el Estado provincial, mpnseñor Bokalic destacó: "Es una verdadera alegría compartir este momento, esta obra significa recuperar vidas y por eso vale la pena, la vida es sagrada, merece ser cuidada porque es un regalo. Este cambio está justamente para favorecer esa vida y poder brindar esperanza a tantos chicos y familias que la han perdido".

Al mismo tiempo agradeció: "Gracias a las autoridades de la Provincia por esta sensibilidad de acompañarnos en esta que es tarea de todos, no solamente de una repartición u organismo, es tarea del Estado, de la Iglesia, de instituciones intermedias y aquí estamos representadas, ojalá que todo esto nos ayude a seguir caminando juntos, superando distanciamientos, creando puentes, buscando a todos, especialmente aquellos que están más desfavorecidos".

Hogar de Cristo

Además, Bokalic llevó a cabo una misa en el nuevo centro barrial del Hogar de Cristo Madre del Puente Carretero en la ciudad de La Banda, del que destacó lo siguiente: "Reunidos aquí en este lugarcito tan significativo para La Banda, venimos de Santiago unidos por el Puente Carretero que es tan importante y hoy este lugar lleva ese nombre, Madre del Puente Carretero. Es tiempo de construir puentes, de estrecharnos las manos, de buscar soluciones para todos los nuestros y especialmente los más desprotegidos. Fruto de este encuentro nació este proyecto, de la mano del gobernador de la Provincia, de autoridades de La Banda, pudimos llegar a este espacio donde va a comenzar el proceso de sanación y recuperación de las personas, esas personas que quizás vendrán con su mamá o alguien cercano para comenzar una nueva vida, este es el primer pasito".

Finalmente, realizó la bendición: "Vamos a pedir al Dios bueno que bendiga a todos los que van a estar comprometidos con esta tarea, a las autoridades en su gesto de solidaridad hacia los más necesitados y que podamos seguir trabajando articuladamente por el bien de la comunidad. Que este sea un lugar convivencial para los chicos que comienzan una nueva vida rodeados de cariño y amor, porque lo que sana nuestras vidas es el amor", cerró.