Un hombre escuchó el llanto de la beba que provenía de un descampado, de la ciudad bonaerense de Punta Alta, partido de Coronel Rosales, se acercó y encontró a la niña junto a la placenta y su cordón umbilical dentro de una bolsa de basura. El joven le avisó a su abuela y ambos asistieron a la criatura con abrigos.

Los policías que la auxiliaron la bautizaron como Milagros, debido a que a la hora en la que fue encontrada hacía mucho frío en la zona.

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Los médicos que asistieron en un primer momento a la recién nacida, que pesó 1,800 kilogramos, aseguraron que "era bueno su estado de salud general", señala el portal Crónica.

En la comisaría de Punta Alta se instruyeron actuaciones por "abandono de persona agravada por el vínculo".