La División Prevención y Protección contra el Alcoholismo, de la Policía de la Provincia, en las primeras horas de hoy realizó la clausura de un kiosco que expedía alcohol sin la debida habilitación.

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Efectivos de esa dependencia policial al realizar recorridos preventivos, alrededor de las seis de la mañana, detectaron que un kiosco ubicado en calle Rodríguez a metros de Avenida Lugones, se encontraba realizando la venta de bebidas alcohólicas. De esta manera los policías realizaron la inspección y se entrevistaron con su propietaria, una mujer de apellido Pérez.

Al ser consultada por los uniformados respecto si contaba con la habilitación bromatológica, esta indicó que no tenía ningún tipo de autorización. De esta manera los policías labraron las actas correspondientes y clausuraron preventivamente el local, hasta tanto regularicen su situación. 

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De esta manera la policía continuara con la tarea de inspeccionar todos los negocios, para evitar estos tipos de prácticas. Por lo que se solicita a los comerciantes regularicen sus situaciones para evitar estas situaciones.