En Villa General Belgrano, ubicada en el departamento cordobés de Calamuchita, existen varias opciones para recorrer y disfrutar de una nueva tendencia como lo es el turismo sustentable. Con las reservas protegidas de Pozo Verde, Cerro de la Virgen y Paseo de los Arroyos el visitante podrá disfrutar de la riqueza de la flora y la fauna y descansar entre los cursos de agua.
El acceso que lleva a Pozo Verde, queda a unos 600 metros de la entrada de la Villa. Se puede ingresar en transporte hasta un estacionamiento ubicado dentro del predio y luego hay que emprender una caminata de 15 minutos por un sendero a orillas del agua y sin pendientes pronunciadas. También se puede alquilar una eco-bici en la Secretaría de Turismo, ya que una vez en el lugar, hay espacios para dejar la bicicleta y hacer el resto del recorrido a pie.
La travesía permite disfrutar desde vegetación autóctona con grandiosos helechos, hasta de un avistaje de aves con visitas guiadas o bien un avistaje de mariposas que es autoguiada a través de juegos, con más de 20 especies para divisar.
El Cerro de la Virgen, circuito obligado
Al llegar a Pozo Verde, la caminata puede continuar (con intensidad intermedia por el ascenso) para adentrarse en las sierras unos 20 minutos más y encontrarse con el Cerro Mirador; una bella panorámica del valle de Calamuchita, de la villa y sus alrededores.
Otro de los paseos obligados para hacer en Villa General Belgrano, es conocer el Cerro de la Virgen y Pico Alemán. Sobre la Ruta Nº 5 se puede acceder a las mejores vistas panorámicas.
El Cerro de la Virgen, a 1.250 metros sobre el nivel del mar, y el Pico Alemán unos metros más adelante, implica que el recorrido total sea de 3.800 m aproximadamente sumando el descenso, por lo que es indispensable tener en cuenta la topografía del sector e ir con vestimenta cómoda.
Es ideal para visitar el Paseo de los Arroyos
El pueblo propone una actividad muy saludable que es el Paseo de los Arroyos para hacerlo caminando o en bicicleta. Es una excursión muy cómoda y relajada que puede llevarla a cabo toda la familia, descubriendo el verde de la vegetación y los rincones pintorescos de los arroyos que cruzan la Villa: El Molle, El Sauce y La Toma.
Entre frondosa vegetación autóctona y un clima agradable, los arroyos son espacios ideales para pasar el día, descansar y disfrutar de unas vacaciones haciendo turismo sustentable.