Una mujer australiana, en 2014, se sometió a una cirugía para tener sus orejas puntiagudas, como la de los elfos (una raza perteneciente a la mitología Celta), sin siquiera pensar en los riesgos que podría tener.
La mujer fue a una clínica en Abbotsford, Melbourne, y se operó, sin embargo, las cosas salieron mal y sus orejas, en lugar de quedar puntiagudas perdieron el borde y se deformaron.
Han pasado dos años desde el suceso, pero ahora la mujer decidió demandar a la clínica Piercing HQ por los daños y molestias que ha sufrido en todo este tiempo.
“Por dos años he sufrido complicaciones, dolor e incomodidad (…) Estoy devastada y no quiero que nadie más tenga que pasar por esto”.
Ella no es la única que se ha enfrentado a una cirugía así. En el 2013 Melynda Moon, una modelo canadiense, también pasó por el quirófano, pero con la diferencia de que su cirugía sí resultó exitosa. Incluso, Melynda publicó un video en YouTube en el que comenta su experiencia.
Si bien su cirugía le dio las orejas que deseaba, Melynda advierte que las lesiones y molestias son inevitables y que la recuperación suele ser muy lenta.
La clínica demandada asegura no haber atendido a la pacienteLouise Hickman, administrador del recinto, afirmó que la joven australiana se contactó directamente con el cirujano Hugh Mattey y no con la clínica, por lo que no sería responsabilidad de ellos, aunque hay un gran problema, pues resulta que el médico que atendió a la mujer falleció recientemente, por lo que la demanda se complica con creces, señala el portal difundir.org.
Los abogados de la mujer rechazan el argumento de la clínica y aseguran que a la chica se le había prometido que la cirugía contaría con máximos estándares de calidad y que el médico jamás hizo advertencia de los riesgos. También afirmaron que la mujer tendrá que someterse a una nueva cirugía por las lesiones y el daño, ante esto exigen que se le indemnice con 6 mil dólares.