La convivencia entre vecinos, en muchos casos, no es fácil. Todos tienen sus razones al realizar reclamos a quien vive al lado o en las inmediaciones y se producen enfrentamientos verbales que, por lo general, terminan solo en una discusión.

Sin embargo, en otros casos, se tornan más violentos. Este fue uno de ellos. Sucedió antenoche en la calle Garibaldi al 600 del barrio Centro de la ciudad Capital. 

De acuerdo con la denuncia, uno de los habitantes de la zona, de 45 años, al salir de su casa advirtió que el auto de su vecino estaba sobre la vereda, impidiendo la normal circulación de peatones; incluso, debían bajarse a la calle, con el peligro que ello significa, para bordear el vehículo estacionado y seguir caminando.

El vecino, al ver al propietario del auto, le reclamó su actitud. “Por qué estacionas el auto en la vereda, las personas no pueden circular; por favor, córralo”, le manifestó. Como respuesta, el automovilista le dijo: “Es mi propiedad, yo estaciono como se me canta la b…”. Se generó una discusión, ocasión en la que el conductor le propinó un empujón a su vecino y lo arrojó contra el suelo. El vecino se reincorporó y se produjo un intercambio de golpes y hubo un feroz forcejeo, hasta que intervinieron otras personas y los separaron. El hombre de 45 años realizó la denuncia en la Comisaría Nº 1 y contó lo sucedido, tras lo cual fue examinado por el médico de Policía.

Sin embargo, el automovilista acusado también se presentó en la dependencia policial y realizó una denuncia en contra de su vecino. 

El hombre de 39 años expuso ante los uniformados que su vecino “le reclamó el haber dejado el auto en la vereda, que era una persona  desconsiderada y que un señor mayor no pudo pasar”. El automovilista sostuvo que le respondió: “Tienes razón, ya me iré, estoy saliendo”. Sin embargo, según denunció, el vecino comenzó a gritar y lo amenazó: “Te doy treinta segundos para que saques el auto, sino te lo rayo entero”. Luego de unos minutos, al abrir la puerta del auto, fue sorprendido por su vecino, empezaron a forcejear y sufrió golpes de puño en el rostro. En consecuencia, el automovilista también fue examinado por el médico de Policía. 

Los detalles de las denuncias fueron informadas a la Dra. Natalia Malachevsky, representante de la Unidad Fiscal Capital, quien ordenó que se calificara la causa como lesiones recíprocas y que se notificara a ambos de una prohibición de acercamiento.