Un tucumano de 46 años, encargado de un establecimiento agropecuario de ocho mil hectáreas, donde se realiza cultivo de maíz y soja, denunció que recibió un llamado telefónico del propietario de un campo colindante, ocasión en la que le informó que vio que parte de la cerca perimetral estaba cortada. El trabajador se trasladó hasta la propiedad ubicada sobre la Ruta Provincial Nº 130, a unos 5 kilómetros de la localidad de Isca Yacu, departamento Jiménez, y comprobó la noticia. Siguió las huellas de un vehículo que ingresó hasta donde están los bolsones de granos cosechados y determinó que había sustraídos dos toneladas de maíz.

El hecho ilícito, que generó un perjuicio de 150 mil pesos, fue denunciado ante personal de la Comisaría Nº 26, que inició la investigación.