Policiales

???Soy prisionero en mi casa???, dijo el policía retirado a quien un ladrón le cortó un dedo

Mientras un sargento retirado de la Policía de la Provincia descansaba en su vivienda, dos delincuentes ingresaron a robar. Los sorprendió y enfrentó. Terminó trenzado a golpes con uno de los ladrones, quien le amputó el dedo pulgar de la mano derecha de un mordisco.

 

El hecho se produjo días atrás, en una vivienda del barrio Primera Ampliación Borges de la Capital y la denuncia fue realizada en la sede de la Comisaría Comunitaria 9 por el exfuncionario policial de 54 años, quien convive en el lugar junto a su esposa e hijos. 

 

Luego del incidente, donde sufrió la amputación de un dedo, el expolicía quedó con temor a represalias por parte de los delincuentes que residen a escasas cuatro cuadras de su vivienda. Uno de los sujetos suele hostigarlo, pasando por su vereda y burlándose de él por la grave lesión que le causó en el dedo. 

 

En diálogo con Nuevo Diario, el damnificado reveló: “Era la cuarta vez que entraban aquí. Me han robado amoladora, taladro, dos perfiles que había comprado para hacer en el fondo para guardar las cosas”. Al tiempo que agregó: “Uno con el aire te encierras de noche y no escuchas nada afuera. Me venían robando así, era la cuarta vez que me entraban a robar. Esa noche fue tipo 2.30 cuando sentí que ladraba la perra en el fondo. Me fijo por el picaporte de la puerta y andaban dos en el patio. Con la bronca de uno que te invadan tu casa y tu privacidad y todas tus cosas; con esa bronca terrible salí por la puerta del frente y los esperé al costado. Esperé que salten la tapia. Ya habían acomodado las pocas cosas que quedaban en el fondo, que ya se iban llevando. Cuando salta el primero, lo volteo de una patada y salta el segundo, lo agarro. El otro me encaró con un cuchillo. Forcejeo y logro agarrar a uno. Nos pusimos a pelear. En la pelea, me mordió el dedo. Estoy cansado de los robos”. 

Tras recibir curaciones y hacer la denuncia, el policía retirado se recupera de las lesiones sufridas y remarcó: “Pasan por frente de mi casa riéndose. Anoche me metí adentro para no seguirlo, porque si lo agarraba iba a pasar otra cosa. Hice la denuncia. Lo tengo viviendo a cuatro cuadras de mi casa al tipo”.

 

En temor a las represalias que pueda sufrir de la familia de los agresores, indicó: “Le puedo hacer algo y de allá –en referencia a los familiares de los ladrones, van a venir a querer incendiar mi casa. Para volver a empezar de nuevo, yo tengo 54 años, no volví a lo que tengo hoy ni siquiera a la tranquilidad. Me ha cortado un dedo, no lo pudieron salvar los médicos. Directamente me lo amputaron. Hoy tengo miedo y un trauma que van a entrar de nuevo. Estoy en alerta”.

 

“Soy prisionero en mi casa. Tengo rejas en toda la casa e hice levantar más la tapia del fondo. Ya no sé cómo más resguardarme. Espero que no vuelvan más, porque ya no tienen nada más que robar; porque ya se llevaron todo. Me dejaron el fondo vacío”, contó el damnificado. Al tiempo que indicó: “Ellos –por los ladrones- no tienen límites para nada, se juntan entre diez o veinte personas y luego vienen a ladrillar la casa”. Finalmente, puntualizó: “Damos gracias a Dios que estoy vivo. Gracias a Dios el otro que se quedó fuera de la pelea no fue de atrás y me hincó por la espalda. Estos ladrones te llevan lo que te pillen, entran como si nada a la casa y te llevan todo. Ojalá que se haga justicia”. El caso fue denunciado oportunamente en la Comisaría Comunitaria 9 y se iniciaron las pesquisas pertinentes sobre los pormenores para realizar  las detenciones. 

 

 

 

Un médico asesinó a tiros a un asaltante que entró a su casa con intención de robo 

En la madrugada del 19 de octubre de 2021, un médico identificado como Daniel Carabajal estaba en su vivienda, ubicada en Calle 102 del barrio Borges. Un delincuente irrumpió en su vivienda, con intención de robo.

 

Carabajal se despertó y lo sorprendió sustrayendo bienes. Se trataba de Agustín Pacheco, de 19 años, residente en el barrio Huaico Hondo de la ciudad Capital. Mientras la Policía investiga diversas versiones sobre lo que sucedió esa noche, lo cierto es que el profesional de la salud extrajo un arma de fuego y realizó disparos. 

 

Pacheco fue alcanzado por un proyectil, lo que le causó graves lesiones y tuvo que ser internado en grave estado en el hospital Regional Dr. Ramón Carrillo. El médico Carabajal indicó que “estaba cansado de los constantes robos que sufría en su casa”. 

 

Tras una agonía, Pacheco murió en el centro de salud el domingo 24 de ese mes. Los familiares  de la víctima fatal, enardecidos, se presentaron en la casa del agresor y tras saquear le prendieron fuego. El médico se entregó posteriormente a la Justicia, por lo que se encuentra detenido y procesado por el hecho de sangre. 

 

El sargento de Policía retirado, que fue asaltado y agredido por el ladrón, reside a escasas dos cuadras de la propiedad de Carabajal, por lo que el miedo a represalias de los familiares del agresor es permanente. 

Asalto

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web