Edmundo Ramos, el inventor del “Auto a basura” viajó desde La Quiaca hasta Santa Cruz y cumplió los objetivo que se planteó algunos años atrás.

El hombre de la localidad de Alta Gracia, Córdoba, pudo hacer funcionar el vehículo con el que se movilizó únicamente a base de residuos secos. Sin la necesidad de gas, nafta ni gasoil.

Su Ford Ranchera tiene la posibilidad de marchar a “gasura”: un gas producido a base de residuos orgánicos carbonizados.

“Lo único que se le agrega es agua, porque el agua se separa en hidrógeno y oxígeno y me da más potencia”, contó el hombre al medio Vía Córdoba.

Si bien el objetivo inicial era hacer el tramo La Quiaca- Ushuaia, por cuestiones de permisos, Edmundo y su esposa Fabiola, sólo llegaron hasta Cabo Vírgenes, Santa Cruz. Los aventureros hicieron 6.300 kilómetros a bordo del vehículo que demostró su funcionalidad.

Este jueves, ambos llegaron a Anisacate la localidad donde tienen su vivienda, después de cuatro meses en viaje.

“Estoy seguro que esto puede ser muy útil para la Argentina y para toda la humanidad. Así que lo hice con ese sacrificio, en post de un bien mayor”, dijo Edmundo.