El abogado Eduardo Javier Leiva, querellante en la causa que investiga el femicidio de María Paola Anríquez, presentó un escrito ante el juez Ramón Tarchini Saavedra, para oponerse a la decisión del recluso “Fede” Guardo de no someterse a la pericia psiquiátrica que había ordenado que le realicen a él y también a sus padres.

El letrado requirió que “no se haga lugar a tal pretensión antojadiza de los imputados y que haga cumplir lo decretado con la debida notificación de las partes”.

Fundamentó su postura afirmando que el documento que elaborarán los psiquiatras expresará los resultados de la exploración especializada de las condiciones mentales de dichas personas, para él decidir acerca de la posible responsabilidad por un hecho delictivo, las consecuencias emocionales y la capacidad para el ejercicio de derechos civiles. Lo que se busca es “establecer si existe o no nexo entre el delito cometido y una enfermedad mental”.

Además, el doctor Leiva considera extemporánea la oposición de la defensa, para la no intervención de un profesional -de un listado remitido al efecto- para integrar la junta médica, “a que pudieron designar un perito de parte y no lo hicieron”, concluyó .